Los alumnos de la Unidad Educativa Venecia llegaron a las 07:00, a pesar de que en la ciudad amaneció lloviendo. La profesora Martha Estupiñán dijo que como nunca todos estuvieron puntuales.
Los estudiantes tenían una invitación de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE) para sobrevolar Guayaquil. El programa Alas para la alegría benefició ayer a 600 niños con habilidades especiales y de escasos recursos. Eran de 18 escuelas y 40 chicos (12 a 13 años) del Centro de Adolescentes Infractores de la ciudad.
Los 30 estudiantes de Venecia fueron los primeros en volar y disfrutar del festival artístico, en el cierre del programa de vuelos de este año.
Génesis Yamilé (10 años), de la escuela Independencia Ecuatoriana, estaba ansiosa, ya que por primera vez iba a subir al avión. Aunque su amiga Doménica Tello (9) decía que tenía un poco de miedo a las alturas, Génesis le daba ánimo diciendo que Dios las protegería y que se sintiera bien, porque eran afortunadas.
Antes de que despegara el avión (Boing 737), el militar Stalin Añascos les dio indicaciones a los niños para su seguridad durante el vuelo.
Pero un grito de felicidad se escuchó en todo el aeroplano al momento de despegar. A pesar de que el cielo estuvo nublado y no se pudo observar la ciudad, los niños estaban felices por haber podido vivir esa experiencia. Por radio se daban las indicaciones de colocarse los cinturones o realizar aplausos por la Navidad.
Ayer se realizaron cuatro vuelos, cada uno duró 30 minutos en el perímetro urbano.
Al final del vuelo los niños recibieron una cajita sorpresa. Mientras unos sobrevolaban la ciudad, los demás participaron de un show artístico. Se pintaban las caritas felices. La cantante pop Daniela Guzmán se presentó en el escenario y hubo una demostración de canes amaestrados.