La obesidad puede llevar a enfermedades cardíacas, dermatológicas y respiratorias. Existen regímenes de dieta y ejercicio diario. Foto: Patricio Terán/ EL COMERCIO.
Si su mascota acumula grasa en el cuello o el abdomen y su musculatura es casi imperceptible, es muy probable que sufra de sobrepeso o, incluso, de obesidad. Aceptar que el animal tiene esta enfermedad es el primer paso para poder iniciar un tratamiento efectivo.
Por lo general, estos pacientes son derivados a los especialistas por otros veterinarios, y no porque sus dueños han detectado el problema. Es común pensar que “entre más gordito, más saludable”, explica Johana Campaña, nutricionista veterinaria. Pero si no es tratado a tiempo, puede llevar a enfermedades cardíacas, respiratorias, dermatosis y osteoartritis.
Las causas principales son la alimentación y el sedentarismo. Cuando la mascota pasa mucho tiempo sola en un sitio cerrado, se aburre y se refugia en la comida. Otros factores son las enfermedades como la diabetes mellitus y el hipotiroidismo, que causan una alteración en las hormonas del animal; esto se reflejará en su tendencia a engordar.
En algunos casos, la genética predispone a perros y gatos a subir de peso. Ejemplares de razas como el golden retriever, french poodle, cocker spaniel, salchicha y bulldog son los pacientes más frecuentes. En los perros pequeños puede ser más complicado detectar el problema.
Renata Gómez tiene un french poodle, hace dos años su mascota empezó a presentar lesiones en la piel. Además, lucía decaído y pasaba la mayor parte del tiempo durmiendo. Para alegrarlo, Gómez le daba golosinas, pero esto solo empeoró la situación. Al llevarlo al veterinario, nunca imaginó que la raíz de todos los malestares era un exceso de grasa.
Campaña sostiene que los propietarios deben estar atentos. Si la silueta del animal se empieza a tornar cuadrada y sus costillas no son sensibles al tacto, es señal de que está en la fase previa a la obesidad, que es el sobrepeso. Al pesarla, superará en un 10% su peso ideal. Por otro lado, cuando excede en un 20%, debe ser tratado como un paciente obeso.
Las mascotas esterilizadas también son propensas a acumular más grasa por el cambio en su metabolismo. Es por eso que Ricardo Laines, veterinario especialista de la Clínica de Especialidades Sinaí, recomienda reducir en un 20% la cantidad de alimentos después de la esterilización.
Es importante que la prevención empiece desde que son cachorros. Cuando perros y gatos incrementan su peso desde los primeros años, será más complicado que en el futuro puedan remediar el problema. Laines explica que si existe una sobrealimentación desde temprana edad, las células adiposas crecen en tamaño y número. Si la obesidad se inicia en la adultez, solamente aumentan en tamaño y no tienen mucha capacidad de llenarse de grasa.
Después de la revisión de su peso y su condición corporal, en ocasiones se hace una medida de su composición corporal. Esto quiere decir que se mide la cantidad de lípidos en su sangre, triglicéridos y los niveles de colesterol LDL y HDL. También se pueden realizar ultrasonidos o una resonancia, pero no son procedimientos que se acostumbren habitualmente.
Para iniciar el tratamiento lo más importante es el compromiso de los dueños de asistir regularmente a los chequeos veterinarios y preparar la comida que necesitan de acuerdo con su peso. Con el proceso adecuado, puede tardar entre 12 y 18 semanas para que alcancen un peso adecuado.
El plan nutricional se elabora tomando en cuenta la raza, el peso y las necesidades de cada animal. En el mercado existen balanceados específicos para estos casos. También se puede optar por la comida casera, pero es necesario que el nutricionista establezca las medidas y los componentes. La fibra, por ejemplo, es indispensable ya que distiende el estómago y produce una sensación de saciedad. Además, deben ser bajos en grasa y ricos en carbohidratos solubles.
La dieta debe complementarse con el ejercicio diario para formar músculo y eliminar la grasa. Así se asegurará que baje de peso y que, además, lo mantenga en el futuro.