Las personas que usan estatinas (fármacos) para bajar el colesterol tienen más riesgo de sufrir disfunción del hígado, falla en los riñones, debilidad muscular y cataratas. Esa fue la conclusión de un estudio realizado en Gran Bretaña por un equipo de la Nottingham University.
La investigación también determinó que los efectos no deseados de las estatinas son a menudo peores en los primeros años de tratamiento.
Los resultados publicados en el British Medical Journal probablemente no afecten el uso de medicamentos, pero los autores del estudio dijeron que los pacientes que toman estatinas deberían ser “proactivamente monitoreados”.
“Nuestro estudio seguramente tendrá fines políticos y de planificación”, señalaron Julia Hippisley-Cox y Carol Coupland, profesoras que lideraron la investigación.
Coupland y Hippisley-Cox estudiaron datos de 368 prácticas de medicina general entre 2 004 692 pacientes de 30 a 84 años, incluyendo 225 922 nuevos usuarios que tenían recetada una amplia variedad de estatinas.
“El incremento de los riesgos persistió durante el tratamiento, pero fue mayor en el primer año”, concluyeron las especialistas.
Los estatinas son uno de los fármacos más exitosos de todos los tiempos y se les ha atribuido la prevención de ataques cardíacos y de accidentes cerebrovasculares. La enfermedad cardíaca es la principal causa de muerte en las naciones ricas del planeta. Reuters