La cinta española narra la vida de una joven liberada y descomplicada que anhela cumplir todas sus fantasías sexuales.
Val (Belén Fabra), de 28 años, es una atractiva mujer con estudios universitarios, trabajo estable y cómoda posición económica. Pero en el transcurso del filme, que dura 95 minutos, su situación cambia por la curiosidad y el deseo de saciar su apetito sexual.
Sale con uno y otro joven, se acuesta con quien desea y cuando lo desea con el fin de tener nuevas experiencias. Lleva su vida al límite, incluso poniendo en juego su carrera, su trabajo y su economía.
Los aspectos negativos de la trama se unen a la pérdida de su abuela (Geraldine Chaplin) con quien Val tuvo una buena relación. Decepcionada y triste por ser despedida, conoce a Jaime (Leonardo Sbaraglia). Se enamora perdidamente y mantiene una larga y tortuosa relación que termina abruptamente dejándola en la nada.
Desesperada, sola y con grandes deudas que cancelar decide trabajar en una casa de prostitutas de lujo. En un inicio eso la complace, pues libera y cumple sus fantasías, además de que empieza a ganar mucho dinero. Poco después descubre el lado oscuro de la realidad en que se encuentra inmiscuida, pero ya es demasiado tarde.