Puede sonar a cliché, pero es cierto: Samantha Villacrés canta desde que era una niña. Recuerda que, cuando tenía ocho años, solía cambiarle la letra a las canciones de Disney que tocaba en su piano, para deleitar a su madre y a sus amigas.
Nadie le enseñó; ella sola aprendió. En casa, ni papá ni mamá tenían un gusto extraordinario por la música. Sama, su nombre artístico, creció escuchando y cantando música cristiana, así como algo de Bruno Mars, Adele y Katy Perry. Más tarde, conoció a las mexicanas Carla Morrison, Ximena Sariñana y Vanessa Zamora.
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La música corría por su cuerpo, y lo demostró durante su paso por el programa ‘La Voz Ecuador’. Participó en la segunda edición y llegó a las finales.
Samantha afirmó que la organización le ofreció firmar con una disquera. “Me ofrecieron el oro y el moro, pero nada se cumplió”. La falta de resultados la desilusionó y se alejó de la música.
Pero la música está ahí; es su ruta de escape, y por eso regresó. Hace dos años (pronto cumplirá 32) inició un proyecto musical titulado ‘Alma‘.
Se trata de su primer EP, que contiene cinco canciones. Tres de ellas ya están disponibles en plataformas como Spotify: Te Solté, 8 Meses y Niña Bonita.
Este último tema salió a la luz a finales de marzo de este año. Es una canción de pop-folk que “nos invita a reconciliarnos con nuestra propia historia, entregándonos el amor que siempre merecimos”.
Sama espera conseguir los recursos económicos para rodar el video, donde buscará visibilizar a la comunidad LGTBIQ+, de la que forma parte.