Andrea Palau Muentes con los chefs Henry Richardson y Sumito Estévez, en la Casa Rosada. Cortesía de la Casa Rosada.
Con una degustación romántica a cargo de los chefs Sumito Estévez y Henry Richardson, la Casa Rosada de Manta recibe a las parejas que están celebrando San Valentín en ese icónico lugar de Manabí.
Para el almuerzo, los reconocidos chefs animaron un ‘mano a mano’ con entradas, platos fuertes y postres, y esta noche, desde las 20:00, dirigen una cena de cinco tiempos, con la intención de dar realce a esta fecha y ofrecer un menú de degustación, enfocado en la comida de la provincia.
La Casa Rosada es mucho más que un restaurante: se trata de una de las pocas casas republicanas (data de 1918) que siguen en pie en Manta, ubicada en pleno centro de la ciudad, junto al parque de la Madre y frente al mar. Fue sede del ayuntamiento mantense, cuando el puerto se convirtió en cantón (1923). Allí también funcionaron la biblioteca, la comisaría y un dispensario médico.
Luego de su restauración, el edificio de cuatro plantas se ha convertido en un complejo de restaurantes, enfocado en la cocina gourmet y el rescate de los sabores de la provincia a través de los platillos criollos.
Para San Valentín, la Casa Rosada invitó a dos chefs de enorme prestigio. El quiteño Richardson impulsa tanto la cocina tradicional como el desarrollo de una nueva cocina ecuatoriana; es investigador y ha escrito artículos, recetarios y libros, y también se dedica a la enseñanza. Estévez, por su lado, es uno de los cocineros venezolanos con más renombre internacional y también es autor de publicaciones, a lo que hay que añadir su participación en televisión.