Jaime Morán (izq.) y Roberto Lalama muestran sus colecciones personales. Foto: María Isabel Valarezo/ EL COMERCIO.
Centenares de discos de acetato sobre una mesa, cajas apiladas con sus cubiertas plásticas y decenas de historias detrás de cada uno de estos vinilos de colección…
Así es como los melómanos Roberto Lalama y Jaime Morán se alistan para la Expo Vinyl de este sábado 18 de septiembre: preparando sus mejores discos para exhibirlos en el Strawberry Fields (avenida González Suárez N21-171 y 12 de Octubre), donde se realizará la primera feria de este tipo para los fanáticos coleccionistas.
Todo comenzó cuando Juan Robles empezó a viajar para aumentar su colección personal, relata Lalama, y se encontró con que en Los Ángeles (Estados Unidos) hay un gran movimiento de discos de vinilo y, dado que en Ecuador hay varios melómanos, decidió traer la idea a este bar quiteño.
“Ni bien conocí a Juan (Robles) ya le compré cinco discos. Mi esposa siempre me dice que soy el mejor cliente de cualquier persona que tenga algo de Los Beatles”, recuerda Lalama, quien también es propietario del Strawberry Fields.
La semana pasada logró aumentar a su repertorio personal dos acetatos de la colección americana de la famosa banda de Liverpool: ‘Beatles ‘65’ y ‘The Beatles’ Second Album’, que tuvieron un costo de USD 30 y USD 35, respectivamente.
“Ese será el rango aproximado de los precios de los discos que habrá el sábado en la feria: entre USD 30 y USD 50, dependiendo de qué tan raros sean los vinilos. Hay acetatos que son mucho más caros, como la colección americana de ‘Yesterday and Today’ de Los Beatles, cuya portada fue censurada. Ese puede llegar a costar hasta USD 20 000”.
Lalama tiene unos 600 acetatos propios, entre los cuales se destacan los de la agrupación inglesa de rock & roll. Jaime Morán, por su parte, tiene una variedad de géneros en su colección personal, como The Doors, Beach Boys y hasta el doble ‘picture discs’ de la banda de heavy metal Iron Maiden.
“Empecé hace poco a coleccionar y ya tengo alrededor de 50 discos, pero siempre trato de que sean las ediciones de los años en los que efectivamente se grabó el disco, ediciones limitadas, o ‘picture discs’. Selecciono bien lo que compro”.
Su afición por los vinilos se inició con la música de The Beatles, pero empezó a escuchar otros géneros porque quería conocer cuáles fueron las influencias de la banda de Liverpool, como Chuck Berry y Little Richard. “Después empecé a escuchar la influencia de ellos sobre otros músicos, como en Black Sabbath, en The Doors, en Led Zeppelin y en Iron Maiden”.
Tiene el último vinilo de los Beach Boys, que pesa 180 gramos, al igual que el de ‘Magical Mystery Tour’ de Los Beatles que está en la colección de Lalama. Son discos pesados pero “tienen una fidelidad increíble, porque son de muy buena calidad: los haces sonar con una buena aguja y es totalmente otra cosa”, explica el dueño del bar Strawberry Fields.
En el caso de Lalama, su afición se inició cuando era un niño, pues con su hermano ha juntado cuanto vinilo abandonaban sus familiares. “En las mudanzas, la gente de lo que más se deshace es de los acetatos: son grandes y pesados”. Es así como, tras el cambio de casa de una tía suya, se hizo acreedor de un vinilo con el sencillo I Will Survive de Gloria Gaynor. Heredó, además, un disco de carbón de su abuelo, con la obra ‘El murciélago’ de Strauss, que fue tocada por la Filarmónica de Londres en 1922.
La Expo Vinyl se iniciará a las 10:00 y costará USD 1. Puede asistir cualquier persona con sus vinilos para venderlos o cambiarlos. También se puede ir para comprar acetatos o solo ver. Se espera una exhibición de 5 000 discos y la feria estará acompañada con la música de un DJ en vivo.