En la iglesia de La Compañía se realizó este sábado 15 de diciembre del 2018, el concierto de coros navideños. Foto: Daniela Cevallos/ EL COMERCIO
La música es un elemento infaltable de la Navidad. Coros y villancicos resuenan en las calles, locales comerciales y hogares pero en esta ocasión la Iglesia de La Compañía, en el Centro Histórico de Quito, se convirtió en el escenario para que niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad canten motivados por las festividades.
Lo hicieron en el Concierto Navideño Melodía e Inclusión organizado por el Patronato Municipal San José. El evento empezó a las 10:30 y participaron seis grupos que son parte de los centros de discapacidad y del adulto mayor de esa institución. Así lo explicó María Fernanda Pacheco, su directora. Ellos reciben talleres tres veces por semana y este sábado presentaron su talento ante sus familiares.
Olga Silva es madre de Jean Pierre E. El joven con discapacidad encontró en la música una forma de salir adelante y de sentirse mejor. Él toca el xilófono y hace tres años asiste a los talleres de los que se benefician cerca de 500 personas.
Seis grupos que son parte de los centros de discapacidad y del adulto mayor del Patronato San José participaron en el concierto de coros. Foto: Daniela Cevallos/ EL COMERCIO
El concierto arrancó con la participación del Coro Campana de Colores de la Orquesta Sinfónica Juvenil del Ecuador. Luego continuaron los grupos de niños y adultos mayores. Finalizó con la presentación del Coro Manos Blancas que está compuesto por niños con discapacidad auditiva y se trata del único en el país. Ellos cantaron con sus manos a través del lenguaje de señas y otra persona replicó las melodías para que todos lo puedan apreciar.
María de Lourdes Santa Cruz es parte del grupo 60 y piquito. Mientras esperaba su presentación resaltó que la música le ha permitido sentirse más activa y que aún puede hacer lo que le gusta. Recordó que en el colegio ella era parte de un coro y luego no pudo continuar con un su pasión pero ahora la retomó.
El concierto fue una muestra de lo que los niños, jóvenes y adultos aprenden durante los espacios de formación. El objetivo es fomentar la inclusión y hacer de la buna forma de terapia, de reinserción educativa y social.