Carlos ‘Nito’ Mestre habla sobre Sui Generis, sus canciones y Charly García. Hoy dará un concierto en Guayaquil y mañana se presentará en Cuenca.
Usted tiene 30 años de carrera como solista. En algún momento confesó que, al principio, le molestaba que el público le pidiera las canciones que grabó con Sui Generis e incluso llegó a pedirle consejos a Paul Mc Cartney sobre su experiencia después de la disolución de The Beatles. ¿Por qué?Me jorobaba porque inmediatamente después de Sui Generis formé el grupo Los desconocidos de siempre lo que significaba un quiebre en mi carrera así que no quería que la gente me siguiera pidiendo esas canciones porque estaba empezando una nueva etapa. Pero después aprendí que uno no le puede pedir a la gente que se olvide de lo que fue. Ahora me resulta imposible no cantarlos.
¿Qué significa que sigan siendo Sui Generis pese a que ya no están juntos?
El otro día con Charly (García) conversábamos sobre todo lo que fue el grupo y el fenómeno cultural y social que fuimos en nuestra época. Y nos preguntábamos ¿por qué somos ex Sui Generis si la gente se sigue enamorando con nuestras canciones. Y yo le preguntaba ¿cuántos Sui Generis hay? Solo dos y yo soy uno de ellos. En los últimos 15 años me he dado cuenta que Sui Generis le ha hecho compañía a millones de personas: enamorados, esposos, alegres, deprimidos, etc.
A propósito de Charly, ¿cómo avanza su recuperación por la adicción a las drogas y al alcohol?
Está bien, lo vi hace una semana y estuvimos conversando, pero nos vemos poco porque está metido de lleno en su rehabilitación.
¿Y han conversado en algún momento sobre un posible retorno de Sui Generis?
No, para nada. Ni hablamos sobre eso porque él sabe que tiene que ponerse muy bien. Nos queremos mucho pero cada uno está ocupado en su vida por ahora.
Las letras de las canciones de Sui Generis fueron en su momento gritos de rebeldía contra las dictaduras militares en Latinoamérica. ¿Cómo esas letras se pueden adaptar a la realidad política de la región?
No suelo hablar mucho sobre política, pero creo que la región está atravesando un momento político que ha generado expectativas y voces de condena en todo el mundo. Las letras de Sui Generis fueron voces de cuestionamiento a una época de tensión. La dictadura prohibió en su momento la canción Juan represión y condenó el tema Rasguña las piedras. Esa época ya pasó y ahora estamos empezando una nueva que se muestra esperanzadora, principalmente por los cambios en las estructuras sociales.
¿Y sus letras, ahora como solista, siguen manteniendo ese mismo matiz?
Mantienen ese romanticismo innato de las canciones de Sui Generis y esa exaltación a la mujer, al amor y a sus estados de ánimo. Mi último disco, Flores en Nashville, casi sin querer es un homenaje a la mujer. El proyecto nació en el 2007. Tras la muerte de mi madre grabé el primer sencillo que lleva por nombre Flores en el mar que es dedicado exclusivamente para ella. Después hice un tema para mi esposa y en ese momento me di cuenta que era un disco que debía dedicarle a las mujeres.
Usted siempre canta en auditorios y teatros. ¿Por qué le gusta establecer esa intimidad con el público?
Siempre he preferido los lugares pequeños para poder volver después. En los lugares grandes los conciertos pasan rápido ya que es casi imposible la interacción con el público.
Usted señaló hace un mes que artísticamente está atravesando su mejor momento. ¿Qué lo hace sentirse así?
Tengo más vida, estoy más maduro y tengo una mejor voz que cuando tenía 19 años porque los armónicos se redondean. Uno canta mejor mientras más vive. Con los años es mucho más rico lo que se compone y se canta cuando se madura.