Brigitte Bardot, el activismo de una 'sex symbol'

Briggitte Bardot, antes y ahora. Foto: EFE / AFP

Briggitte Bardot, antes y ahora. Foto: EFE / AFP

Briggitte Bardot, antes y ahora. Foto: EFE / AFP

La musa de los años 60, cumplió 80 años este domingo 28 de septiembre del 2014. Su trabajo artístico resaltó con filmes como ‘Y Dios creó a la mujer’ –película dirigida por su entonces esposo Roger Vadim-, ‘ Viva María!’ o ‘Contempt’. Su sensualidad la marcó como ícono de moda y fue calificada como 'sex symbol'.

Pero más allá del lado cultural de Bardot, sus actividades como vocera de campañas han dejado marca en la sociedad.

Bardot se fue del mundo artístico en 1973. Ha comentado -en varias ocasiones- que se separó por considerarlo un mundo frío y banal. Desde entonces su enfoque primordial ha sido el cuidado de los animales.

Se volvió activista llegando a luchar hasta las últimas consecuencias en contra del maltrato animal. En 1978 la detuvieron por protestar en Terranova y Labrador, Canadá. La actriz se encontraba allí para condenar la indiscriminada matanza a las focas.

Este levantamiento provocó que el Concejo de Europa prohíba la importación de la piel de focas en sus estados miembros.

Bardot, se ha caracterizado por ser una persona realmente dedicada a la difusión de campañas para la concientización del maltrato animal. Por ello, realizó la serie documental ‘SOS: Animales’. Siendo el primero un episodio dedicado a los elefantes, enfocado en la caza furtiva y el comercio de marfil.

Una emotiva Bardot mostraba a los televidentes sus motivos para luchar en contra del comercio de elementos provenientes de elefantes. Cuando se televisó este episodio, el gobierno francés pasó una ley para prohibir la importación de marfil.

Viendo que su voz tenía eco, la actriz se plantó la idea de trabajar estas temáticas en una fundación. Así creó la Fundación Brigitte Bardot.

Bardot, se ha dirigido a la mayoría de presidentes franceses para darles a conocer su desacuerdo en el trato animal. En el 2013, mencionó en una entrevista para la revista Vanity Fair que estaba dispuesta a marcharse de Francia y pedir exilio en Rusia, si nadie del gobierno aportaba para mejorar la vida de dos elefantes de circo. Los animales se encontraban con tuberculosis y estaban condenados a muerte–por una corte de Lyon-.

Nunca ha tenido problemas en expresar claramente lo que la mueve, por eso manifestó al diario Le Parisien “si quienes están en el poder son cobardes y lo suficientemente imprudentes como para matar a los elefantes… entonces he decidido que voy a pedir la nacionalidad rusa para salir de este país que se ha convertido en nada más que un cementerio de animales”.

La actriz resalta -a la agencia EFE- que muchas de sus peticiones no han recibido más que promesas incumplidas. Pero la arista sigue en pie de lucha porque reconoce que los animales lo dan todo y no piden nada.

Suplementos digitales