La icónica figura renovó su aspecto, con menos brillos y más sobriedad. Los creadores buscan reflotar sus ventas con opciones que reflejen una mayor diversidad y que dejen un mensaje de empoderamiento en las niñas. Foto: Instagram/ Barbie.
Estados Unidos podría torcer la historia esta elección y elegir la primera presidenta mujer en su historia, en este caso Hillary Clinton. Mientas tanto, la histórica muñeca Barbie refuerza los deseos de que cada vez más personas de sexo femenino ocupen cargos políticos importantes.
Con un traje sobrio y elegante, con los colores de la bandera estadounidense, la nueva Barbie presidente contrasta con su predecesora, la Barbie presidente de 2012, que lucía traje y zapatos rosas en composé; y ciertamente se diferencia de la de 1992 que, a pesar de traer un traje elegante complementario, se vendía enfundada en un vaporoso vestido de tafetán rojo azul y blanco, un tanto inadecuado para la imagen de una primera mandataria. Además, esta vez, su compañera de fórmula es otra Barbie, otra mujer.
La pareja de muñecas está disponible desde hoy (13 de julio de 2016) en seis diferentes tonos de piel y se exhiben en una caja paradas una junto a la otra, detrás de un pequeño podio que reza “¡La primer fórmula femenina!”.
La nueva Barbie presidencial muestra además diversas frases de aliento en la caja como: “Cada vez hay más mujeres que se postulan para un cargo público de todos los niveles” o “¿Quieres hacer del mundo un lugar mejor?”.
Las muñecas se venderán a USD 25 sólo por este mes en todo Estados Unidos en medio de los esfuerzos de Mattel por renovar la imagen del juguete y revertir las caídas en las ventas de los últimos años. La compañía ha hecho una renovación total de la icónica muñeca para orientar la representación de Barbie hacia una vocación o una carrera en lugar de que sólo tenga un aspecto encantador.
A principios de 2016, Mattell presentó la verdadera e histórica renovación de la muñeca para ir en búsqueda de una representación más real de la diversidad corporal de las mujeres en todo el mundo con muñecas con más curvas, más altas y más bajas que se venden en múltiples combinaciones de tonos de piel y de cabello.
En consonancia con esta nueva filosofía de la Barbie se presentó también la campaña publicitaria You Can Be Anything o (“Tú puedes ser lo que quieras”, en español) para resaltar y fomentar el costado imaginativo de jugar con una Barbie y evitar que la discusión se centre sólo en su cuerpo y sus diferentes y nuevos atributos físicos.
La portavoz de la multinacional, Michelle Chidoni se negó a comentar sobre las ventas de los modelos presidenciales, pero dijo a The Wall Street Journal que en esta ocasión la empresa ciertamente “está viendo un aumento en las Barbies profesionales”.
A pesar de que Barbie ya renovó su cuerpo, la presidencial se vende sólo con el “cuerpo original” pero está disponible en diferentes tonalidades de cabello y piel. Desde la empresa no dieron detalles de la razón, pero según Michelle Chidoni van “a introducir la diversidad corporal en otras profesiones“.
Lisa McKnight, vicepresidente senior y gerenta general de Barbie, dice que las muñecas no apoyan a ningún candidato en particular pero cuenta que la han estado trabajando por más de un año y que su objetivo principal es apuntar a la inspiración de la muñeca como una “oportunidad para el debate de las mujeres y el liderazgo”.
El aspecto presidencial actual incluye una chaqueta de color rojo y blanco con textura, una falda tobillera azul y zapatos de tacón bajo. La vicepresidente luce una chaqueta amarilla peplum, un collar de perlas grueso, con pantalones negros y gafas oscuras gruesas.
Los peinados, por su parte, varían según la versión y el color de cabello pero lo llevan suelto, corto enrulado o con un elegante recogido. El look presidencial 2016 muestra “una visión más contemporánea, profesional y realista de la moda”, señala McKnight.
Los candidatos reales para ocupar la Sala Oval también opinaron: “Todos los niños de todas las razas y géneros merecen vivir en un mundo lleno de ejemplos que muestren que pueden ser lo que quieran ser, incluso presidentes de los Estados Unidos”, dijo una portavoz de Hillary Clinton a The Wall Street Journal.