Anoche, el Instituto Fleni de Buenos Aires emitió un comunicado nada alentador para los seguidores de Gustavo Cerati: “La tomografía computada mostró un infarto extenso en el hemisferio cerebral izquierdo y daño del tronco cerebral secundario a hipertensión endocraneana”. Nuevos partes solo se darán cuando haya cambios en su estado de salud. Corresponsal
La familia de Cerati mantiene el silencio
Las preguntas acerca de la salud del cantante Gustavo Cerati no paraban en la afueras de la Clínica Fleni desde su llegada, la noche del lunes. Algún fan se acercaba a los periodistas para acceder a un poco de información sobre su recuperación.
Pero el parte médico se demoró en llegar y nadie en la clínica supo dar versiones certeras de qué ocurriría. Primero lo prometieron a las 12:00 de ayer; luego, a las 12:30 y luego a las 13:00.
Desde la noche del lunes, cuando llegó el músico desde Venezuela, un comunicado oficial del instituto especializado en enfermedades neurológicas decía que ayer al mediodía se entregaría a la prensa un parte oficial.
Eran las 17:00 y el parte aún no era difundido. Los familiares de Cerati, que tienen la potestad para autorizar la comunicación de su estado de salud, han preferido mantener el silencio.
Por eso, solo por la noche del lunes llegaron pocos fanáticos. “Hubo pocos fans con carteles que decían ‘Fuerza’. Pero hoy ya no hay nada”, contó Sonia, quien vive junto a la clínica.
Los familiares del ex vocalista de Soda Stereo (su madre y sus dos hermanas) pidieron a sus seguidores que no llegaran hasta el Instituto. Por eso, ayer no se vieron fanáticos en las afueras.
Solo hubo aislados gritos de “¡aguante Gustavo!” desde alguna moto o un automóvil que pasaba por la calle Montañeses, en donde se encuentra el Fleni. Al cierre de esta edición, el parte médico aún no llegaba. Mauricio Valacco, de la empresa del seguro médico que trajo al músico, dijo que “llegó en las mismas condiciones que estaba cuando salió de Venezuela”.