La escena del rock and roll en el país tiene cientos de bandas. Los estilos son diversos, pero la manera en que los músicos se manejan para subirse en un escenario siempre es con profesionalismo, con ciertas exigencias que aseguran que la agrupación pueda tener un buen sonido para su público.
El funcionamiento adecuado de los sistemas de emisión de sonido es el aspecto principal que el promotor debe tener en cuenta para una ‘tocada’. “Eso representa una responsabilidad y es parte del respeto que el promotor debe tener hacia la banda, asegura Paulo Gallegos, baterista de la banda cuencana Basca.
Por ello explica que cuando la banda recibe una invitación para tocar, ellos le envían el requerimiento técnico. Esta es una lista de las necesidades de la banda en el escenario. Por ejemplo, dice Gallegos, un escenario que tenga un espacio de ocho por siete metros o una consola de sonido con 32 canales para conectar instrumentos y micrófonos.
Pero esta banda trabaja bajo una modalidad de paquete. Eso significa que la banda se encarga de su logística, es decir de buscar hotel, movilización y alimentación, si la tocada es fuera de Cuenca. “Con ello nos evitamos que los organizadores tengan más peso del que ya tienen con la organización del concierto”.
Hacer música independiente es complicado y te encuentras con un millón de situaciones, dice Pablo Maya, mánager de la banda quiteña Biorn Borg. Él resume la forma de llevar a la banda a tocar en tres pasos. El primero es contactar a la banda y se lo hace directamente con él vía telefónica o por correo electrónico. El segundo paso es que el promotor o la persona que los invite a tocar cumpla con todas las necesidades de la banda. “Nosotros les enviamos la lista de necesidades para que sonemos bien y la idea es que cumplan con eso”.
El tercer paso es que, además de las necesidades técnicas, los organizadores deben contratar un grupo de técnicos que manejen los equipos de sonido. Además de un grupo de personas que brinden seguridad.
David Barzallo, baterista de la banda quiteña Curare, concuerda con Gallegos y Maya en que es importante que el organizador tenga los mínimos elementos de amplificación.
Según él, si la banda se presenta fuera de la capital, el organizador debe asumir los gastos de movilización del grupo. A eso se le debe añadir el hospedaje y la alimentación de los integrantes de Curare. Uno de los requerimientos que la banda tiene es una consola de sonido con 24 canales para la amplificación.
Lo que debe tener en cuenta para realizar un concierto con bandas de rock and roll
El lugar en el que tocará la banda debe ser amplio, en caso de que exista gran afluencia de personas. Se deben tomar todas las medidas de seguridad.
El organizador debe contratar personal de seguridad que esté en las puertas controlando el ingreso de personas.
Se debe comunicar a las personas que asisten que no pueden ingresar con armas como cuchillos o cadenas, ni con bebidas alcohólicas.
En el sitio del concierto deben estar definidas e identificadas las salidas de escape en caso de emergencia.
Si el asistente pretende ingresar con una mochila, el personal de seguridad debe encargarse de esculcarlo.
El promotor debe tener todos los permisos necesarios para que se desarrolle el concierto. Necesita permisos municipales, de los Bomberos, etc.
De ser necesario, un equipo de Bomberos y miembros de la Policía deben resguardar la seguridad en el local.
Ciertas bandas suelen pedir un espacio en el que puedan descansar antes o después de su tocada. Ellos exigen seguridad y garantías.
Es responsabilidad del organizador garantizar la seguridad de todas las personas que llegan a los conciertos.
En pocos casos las bandas de rock and roll tocan en fiestas privadas, pero si lo hacen tienen tarifas que se negocian con la persona que los invitó.
En muchos casos esas tarifas sobrepasan los USD 1 000. Pero esos costos dependen del lugar en el que van a tocar.
Debe existir un espacio determinado al que solo puedan acceder los miembros de un grupo de rock. Es una medida de seguridad para los músicos.