Enrique Estuardo Álvarez, durante la inauguración de su nueva exposición titulada ‘Ecos del Dorado’. Foto: Vicente Costales/ EL COMERCIO.
Los rostros de hombres y mujeres y las imágenes de cerámicas de culturas precolombinas son los protagonistas de ‘Ecos del Dorado’, la muestra que el artista ecuatoriano Enrique Estuardo Álvarez inauguró el sábado 23 de junio del 2018, en la Galería Sara Palacios.
Las 21 obras que son parte de esta exposición son una extensión de ‘Dorado’ la muestra que, durante estos meses, ha recorrido distintos espacios culturales de ciudades de Estados Unidos, entre ellas Lexington, Chicago, Washington y próximamente Nueva York.
En ‘Dorado’ y ‘Ecos del Dorado’, Álvarez vuelve su mirada al pasado precolombino, una de las referencias de la identidad ecuatoriana, para buscar en los vestigios arqueológicos un diálogo con la contemporaneidad.
Lo que propongo en esta serie -dice- es volver la mirada a una los objetos del pasado para ver qué evocan cuando están junto a los rostros del presente. Las imágenes de estos cuadros son parte de una historia que ha intentado borrarse”.
Para Sonia Kreamer, historiadora del arte, estas obras están cargadas de profundas resonancias del pasado. “Son piezas que dan rostro a un tiempo mítico, donde los dioses coexistían entre la gente y la naturaleza”.
Esta serie también hace referencia a la búsqueda quimérica del Dorado, un territorio donde supuestamente abundaba el oro. Palacios agrega que el Dorado de Álvarez es la búsqueda idílica de la identidad latinoamericana, del ser colectivo y del yo individual.
Las miradas compungidas de ‘Ecos del Dorado’ se mezclan con piezas de cerámica destruidas que dan la sensación de salir de las sombras o de ese espacio decorativo al que han sido conminadas. Todas acompañadas de una paleta de colores donde priman las láminas de oro y las pinceladas de tonos ocres.
Estas obras también se pueden leer como la extensión del diálogo permanente que el artista ha entablado a lo largo de su carrera, en relación con el mestizaje y que ha plasmado en proyectos como Quilago o el mural Mujeres Libertarias, que se exhiben en El Trébol, en el centro de Quito.
La exposición de Álvarez -un artista que ha participado en varias bienales internacionales de arte y que ha expuesto en centros de Europa, Asia, China, Japón y Estados Unidos y Latinoamérica- estará abierta al público hasta finales de julio. La entrada a la exposición es libre.