Edder Calderón, presentador de ‘El Matinal’ de Gamatv, en su nuevo restaurante. Foto: Francisco Flores/EL COMERCIO
Fue mesero, barman, administrador y relacionista público de discotecas. Llegó a tener cinco centros de diversión nocturna entre Guayaquil y Samborondón, antes de entrar hace tres años al programa de competencia ‘Calle 7’, de TC Mi Canal. Antes de iniciar su carrera en las ‘discos’, reconoce que tuvo problemas con el alcohol y las drogas.
Edder Calderón, presentador del programa ‘El Matinal’ de Gamatv, cuenta que los químicos “del humo y de la coca”, y la testosterona sintética que se aplicó a los 30 años, aceleraron su caída de cabello.
Los gorros que usó para disimular las “entradas” en el casting se convirtieron en un emblema. Hizo de sus debilidades, fortalezas, dice el guayaquileño de 33 años.
“Cuando llego a ‘Calle 7’ me ponen ‘La Roca’. Me enojé porque no quería que me cambien el nombre, sin saber que iban a posicionarme en el mercado y que el sobrenombre iba a pegar en los televidentes”.
Aún conserva la discoteca Soul (centro de Guayaquil), pero “es un entorno devastador en la parte física, mental y emocional”. Los compromisos en televisión lo obligaron a prescindir de los otros negocios, el trabajo de una década.
Aunque nunca aprendió a cocinar, ‘La Roca’ inició el año con el restaurante La isla del marisco, en la ciudadela La Garzota. “Siento que fue una decisión poco acertada entrar a la televisión, que genera fama y reconocimiento, pero en el factor económico no se compara a cuatro o cinco negocios.
“Me enamoré del mundo de la televisión”. Tiene mucho que agradecer a la pantalla chica: en un segmento de ‘Calle 7’ conoció a su esposa, Karen Ramírez, exreina de Machala, cuando ella participaba en el certamen Miss World.
Los televidentes lo vieron como hombre duro en la competición, pero también romántico. “Un enamoramiento real, no como lo artificial que crean ciertos programas para generar más rating”. La audiencia del programa siguió los pormenores de la relación y el casamiento en directo.
La TV también le ha traído cosas malas, como la polémica en la que se vio inmerso en las últimas semanas, cuando se peleó con reporteros de farándula y se negó a que su esposa protagonizara un ‘reality’.
“No es lo que dice la gente que yo soy machista, que estoy contra su desarrollo profesional. Es un programa para público adulto, que se transmite a partir de las 22:00. No puedo permitir que a mi esposa la exhiban en un programa donde me la van a sacar medio desnuda”, justifica.
Tras el casting de ‘Calle 7’, la producción decidió dejarle a Calderón el gorrito con el que se presentó, como una “marca personal”. En ‘Apuesto por ti’, que necesitaba una figura más formal, le mandaron a confeccionar un turbante.
“Mis abuelos son libaneses y la productora siempre me dijo, tú eres medio turco, sacamos ventaja de mis desventajas, el turbante hoy es mi distintivo”.