El edificio en el que anteriormente funcionaba la Superintendencia de Compañías será desde el próximo 16 de enero del 2019 la biblioteca. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO.
El Gobierno de Ecuador inaugurará la una megabiblioteca en la ciudad portuaria de Guayaquil, la más poblada del país, que se convertirá en un espacio especializado en temas del arte y la cultura.
Se trata de la Biblioteca de las Artes, “el primer repositorio público especializado en artes y cultura en Ecuador”, que se inaugurará el miércoles 16 de enero del 2019, precisó el ministro de Cultura, el escritor Raúl Pérez Torres.
Esta biblioteca ha sido construida y habilitada en un edificio donde antiguamente funcionaba la Superintendencia de Compañías y formará parte de la Universidad de las Artes, el centro académico cultural más importante del país.
El inmueble, de 5 300 metros cuadrados, estará articulado al centro, a otros museos y al edificio de correos y su ejecución ha demandado una inversión de USD 2,6 millones, financiados a través de un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), aseguró el ministro.
La Biblioteca, añadió, cuenta con una colección de 10 273 libros sobre teatro, cine, literatura, música y ciencias sociales, entre otros temas, y en su inauguración se prevé la participación del presidente ecuatoriano, Lenín Moreno.
Además, cuenta con un archivo histórico del diario público El Telégrafo, el decano de la prensa nacional, con más de 1 400 ediciones impresas del periódico desde 1886, así como con cerca de 1,4 millones de fotografías captadas durante el siglo XX.
También estará integrada por salas de lectura, hemerotecas, ludotecas, librerías, cabinas audiovisuales, aulas de estudio y de investigación, entre otras áreas.
Su inauguración, además, da inicio a las acciones que el Ministerio de Cultura desarrollará durante 2019, que ha sido declarado el ‘Año de las bibliotecas’, apuntó Pérez Torres.
Esa declaración supone la intervención gubernamental en muchas bibliotecas del país, con el objetivo de que el arte y la cultura forme parte sustancial del convivir social, agregó.
Por ello, añadió, la apuesta por declarar a este como el ‘Año de las Bibliotecas’, que sucede al ‘Año de los museos’ en 2018, busca además que la gente se interese por la cultura y por la lectura.
Esta estrategia, reflexionó el ministro, será como el Aleph, un “centro donde se concentra todo el conocimiento” del universo, ese punto mítico en el que confluyen el presente, el pasado y el futuro, según señala en el cuento del mismo nombre el célebre escritor argentino Jorge Luis Borges.
Y es que, en un momento histórico dominado por la tecnología digital y el internet, “el ejercicio de la lectura en libro es importantísimo”, tanto por el contacto íntimo con el contenido como por las utilidades que puede suponer trabajar en el papel, dijo Pérez Torres.
Con la edición impresa “se vive el libro” y aparece como una extensión del cuerpo, añadió el ministro al insistir en que “el papel todavía tiene una significación”.