Desde julio empezó a funcionar en Ecuador el FIAS, con un
presupuesto de USD 61 millones para la conservación y la lucha contra el cambio climático
Tras dos años de la liquidación del Fondo Ambiental Nacional (FAN), el país contará con un nuevo sistema para la administración de las donaciones locales e internacionales orientadas a la conservación de los ecosistemas. Con este nuevo Directorio, se espera mayor coordinación con la autoridad ambiental.
El recién creado Fondo de Inversión Ambiental Sostenible (FIAS), presentado el mes pasado, es el mecanismo para hacer el seguimiento de proyectos en curso y buscar oportunidades de financiamiento para nuevas iniciativas.
Ana Albán, directora Ejecutiva Encargada del FIAS, explica que, al igual que con el anterior fondo, se seguirán enfocando principalmente en los proyectos: Fondo de Áreas Protegidas, Socio Bosque y Fondo de Especies Introducidas para Galápagos. Para estos proyectos se cuenta actualmente con USD 61 millones.
El cambio principal está en la estructura del Directorio. En esta ocasión, se suma la figura de un observador que será nombrado por quienes aportan al fondo, distintos al Estado ecuatoriano. Esta persona podrá solicitar la información que considere necesaria sobre los recursos aportados.
Esta es una “demostración de transparencia” por parte de esta nueva administración y del proceso, dice Albán, ya que también les va a dar mayor seguridad a los donantes sobre el uso de los fondos.
El Directorio también estará conformado por representantes del MAE, Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades), Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, un delegado de la sociedad civil, de las organizaciones ambientales y también de la academia.
Según el MAE, al contar con tres representantes de la ciudadanía, se busca eliminar posibles conflictos de intereses y darle un papel más importante a la sociedad civil en la toma de decisiones. En el caso de haber empate en una votación, el MAE tiene voto dirimente.
Actualmente, están definidas las instituciones, pero no todas las personas que las representarán. El cargo de director ejecutivo también se nombrará a través de un concurso, cuando todos los miembros hayan sido elegidos.
“En su momento hubo un alejamiento de la administración del Directorio del entonces FAN con la autoridad ambiental,y no hubo un trabajo conjunto que permitiera un mayor levantamiento de recursos”, dice Albán, que considera queesafue una de las principales causas para la desaparición del anterior fondo.
Durante su período, Lorena Tapia, exministra del Ambiente, pidió la modificación de los estatutos del FAN, pero la solicitud no fue acogida. El 10 de abril del 2016, el Fondo fue liquidado a través del Decreto Ejecutivo 998, respondiendo a una “optimización de recursos”, como se justificó en ese momento, tras 20 años de funcionamiento.
Según el MAE, desde ese momento se empezó a trabajar en una alternativa para reemplazarlo. No hacerlo hubiese significado la devolución de USD 60,5 millones a los donantes, además de los intereses, por los canjes de deuda.
Luego de dos años de explorar opciones, se propuso la creación del FIAS a la Presidencia de la República, en julio del 2017. Su aprobación mediante el Decreto Ejecutivo 146 se dio en septiembre de ese año. Desde esa fecha se han realizado los trámites legales y administrativos para que los derechos y obligaciones del FAN pasen al FIAS y pueda entrar en operatividad.
Albán, quien estuvo en la Comisión Liquidadora del Fondo, considera que cuando se ordenó la disolución, no estaban conscientes de las consecuencias que podría tener. Fue un largo proceso no solamente para no devolver los fondos, sino para que también exista el espacio para crear este nuevo instrumento financiero, que les dé todas las seguridades a los donantes de que se continuaría cumpliendo los convenios originales y trabajando en proyectos ya financiados, dice.
Durante estos dos años, se continuó con la negociación de USD 60 millones para el Fondo REM, Amazonía Norte y aportes para el Fondo de Áreas Protegidas de la zona marino costera. Algunos se van a recibir este año y otros en los próximos cuatro años.
Se han establecido también algunas prioridades en las que se quiere trabajar con este instrumento como el fortalecimiento de los bioemprendimientos y la bioeconomía. Según el MAE, el FIAS es un mecanismo más completo, en comparación con el FAN, ya que también fue creado para apoyar acciones de mitigación y adaptación al cambio climático y a la gestión de la calidad ambiental en el país.