El docente Casiano Añapa es el autor del nuevo diccionario del idioma chapalá. Foto: Marcel Bonilla /EL COMERCIO
Los establecimientos bilingües de Esmeraldas contarán con un diccionario chachi, que permitirá rescatar la lengua materna de esta nacionalidad, asentada en tres cantones.
El trabajo, que duró un año, fue realizado por el profesor Casiano Añapa. Él es docente desde hace más de 34 años de las comunidades indígenas del norte de Esmeraldas.
Una de las principales preocupaciones de los 28 centros chachis de la provincia es que de los 14 000 indígenas de esa etnia, solo el 60% utiliza su lengua materna: el cha’palachi. El idioma también es conocido como el chapalá.
Según Añapa, una de las razones para la pérdida de este idioma es la migración hacia la ciudad, en donde conviven con afros y mestizos.
Juan Pichota, perteneciente a esta etnia, conoce varias palabras en su idioma materno. Pero él no sabe escribir lo poco que habla del chapalá. “A veces tenemos prejuicios de hablar en nuestro idioma cuando estamos junto a quienes hablan español, porque nos miran de forma extraña”.
Algo similar ocurre con Lucrecia Cimarrón, que desde hace 15 años vive en la ciudad. Y aunque cada mes regresa a su comunidad, cerca del río Cayapas, habla poco su idioma.
Según la Federación de Centros Chachis de Esmeraldas (Fecce), el uso de su lengua es una lucha con los más pequeños de las comunidades que se educan en las escuelas interculturales, donde se enseña en español y cha’palachi.
En los cantones Esmeraldas, San Lorenzo, Muisne y Quinindé hay 56 escuelas de educación intercultural bilingüe, donde se educan 2 700 estudiantes chachis, afros y éperas.
El primer tiraje de 3 500 diccionarios en cha’palachi y español irá para estos establecimientos.
El financiamiento de los diccionarios es cubierto por la Casa de la Cultura de Esmeraldas, que difundirá el libro a las escuelas regulares de la ciudad para que se conozca el idioma que hablan los chachis.
Yurqui Minota, director de la Casa de la Cultura, dijo que para una mejor presentación del libro se contrató un dibujante para complementar este contenido con imágenes.
El trabajo de Añapa contiene 450 palabras entre saludos, formas de pronunciamiento de palabras, oraciones cortas y largas, vocabulario y el alfabeto en chapalá.
Para las autoridades de la escuela intercultural bilingüe José Espíritu Santo Cimarrón, en el sur de la ciudad de Esmeraldas, el diccionario ayudará a los 67 estudiantes chachis que ahí se educan.
En ese mismo plantel hay 80 estudiantes afros, que aprenden de este idioma junto con los niños indígenas, que llegaron de la zona norte.
Una de las acciones de fortalecimiento del idioma son las reuniones en las comunidades indígenas como Zallo Grande, Santa María, Pichiyacu Grande, Rampidal, Agua Salada, Agua Blanca, Corriente Grande, Corriente Seco, Gallinazo, entre otras.
Con ellos se hacen ejercicios de comprensión del idioma, con maestros de las mismas comunidades, donde están los asentamientos indígenas.
Según Santiago de la Cruz, dirigente chachi, con una campaña de difusión del diccionario se va a estandarizar la lengua y dialectos, porque hay palabras distintas pero con el mismo significado.
De esta manera se busca que los niños aprendan, de una forma más didáctica, a escribir las pocas frases que aún utilizan con sus familiares.