Ya no será necesario esconderlos. Y los profesores no podrán imponer sanciones al encontrarlos sobre los pupitres. Una de las noticias más celebradas por los estudiantes fue la disposición del ministro de Educación, Augusto Espinosa, sobre el uso autorizado de teléfonos celulares en las clases.
Esto para aprovechar la dotación de Internet inalámbrica que tendrán varios colegios en el país, que pasarán por un proceso de reestructuración integral. “No está en nosotros el prohibir, sino enseñar a aprovechar la tecnología de la mejor manera”, indicó Espinosa.
Esta oferta generó reacciones en las redes sociales, como Twitter. A la cuenta @Educacion_Ec llegaron inquietudes sobre esta disposición. Pero el Ministro señaló que “si marginamos a los estudiantes de las herramientas tecnológicas, los marginamos de la era tecnológica”.
En la cuenta oficial del Ministerio de Educación además recalcaron -en varios tuits- que se bloqueará el acceso a redes sociales y a otras páginas que puedan generar distracción entre los jóvenes.
Jenny Alvarado, presidenta del Colegio de Psicólogos Educativos del Guayas, cree que esta decisión es apresurada. Aconseja primero afianzar el uso de otras herramientas tecnológicas para investigación: computadoras portátiles y tabletas, equipos que permanezcan en las mismas instituciones educativas.
De lo contrario, opina Alvarado, el celular podría ser solo una distracción. “Hay chicos que los usan para chatear, fotografiar a los profesores y compañeros e insultarlos”.