El mobiliario erótico puede ser un aliado para mejorar la experiencia íntima de la pareja. Foto: Pixabay
Cuando de sexualidad se trata, vienen los tabús. Hablar de placer en los encuentros íntimos aún es un tema que causa vergüenza y, por ende, hay desconocimiento de todas las posibilidades que hay en el ámbito, sobre todo en el uso de determinados muebles para una experiencia satisfactoria.
Los juguetes sexuales y la lencería suelen ser los aspectos que más se asocian con el sexo placentero, pero poco se piensa en el mobiliario. Sin embargo, los muebles cobran un interés al tratar de innovar con posturas sexuales a través de guías, como, por ejemplo, el clásico Kamasutra.
El sexo trae múltiples beneficios para el estado de ánimo y para la salud física. En el acto, el ritmo cardíaco aumenta por lo que el corazón bombea más sangre por el sistema circulatorio. Una investigación realizada por un equipo de la Universidad de Michigan EE.UU. encontró que una alta frecuencia sexual previno problemas cardiacos en los hombres, mientras que en las mujeres ocurría cuando esta práctica era de calidad.
Muebles con diferentes fines
Si se busca adentrarse en la práctica de nuevas posturas para el encuentro íntimo, los especialistas recomiendan asegurarse de tener un espacio seguro y adecuado para la práctica, ya que pueden generarse accidentes no deseados. Además, se debe tomar en cuenta que si la postura es molesta, dolorosa o no permite disfrutar del acto, no se debe continuar y más bien buscar otra que sea confortable para ambos.
Para esto, los aliados son los muebles eróticos que ahora se pueden encontrar en ‘sex shop’ o por Internet. Incluso hay diseñadores que se dedican a crear estos artículos con el fin de ofrecer ergonomía y seguridad. Uno de ellos es el diseñador industrial mexicano Andrés Amaya. Él fue uno de los pioneros en la creación de estos artefactos.
Según señala el profesional en un reporte de El País, el mobiliario erótico no solo permite mejorar la sexualidad en términos mecánicos, sino también mejorar las experiencias con elementos relacionados con la imaginación, el deseo, la sensualidad, entre otros.
Escoger la pieza adecuada dependerá del objetivo que se quiera lograr, asegura. Hay sillas especiales para ciertas posturas, sofás y cojines con textiles ideados para incrementar el placer.
En la lista de opciones en el mercado hay una variedad de muebles. Por ejemplo, un ‘puf’ que es a la vez una caja de sorpresas. Este cubo que se puede integrar en cualquier estancia de forma discreta sirve en realidad para guardar toda clase de juguetes sexuales.
También hay camas especiales como la ‘Movement Bed’. Este artefacto reproduce el ritmo corporal del acto con el objetivo de proporcionar sensaciones más placenteras. Además, se busca que se haga el esfuerzo mínimo, por lo que puede ser ideal para quien tiene problema de columna.
Pero el más tradicional y conocido es el sillón tántrico que también está ideado para algunas posiciones del Kamasutra. Tiene una forma curva que puede ayudar con los movimientos sin que sufra ningún músculo o haya riesgo de dolor en las articulaciones. Su diseño ergonómico está pensado para la comodidad de la pareja.
Estos artefactos se pueden ubicar en el dormitorio o, si se dispone de un espacio específico, crear un ambiente romántico con algunas de estas piezas.