Un cocodrilo embistió a un bote de kayak, ocupado por un hombre en Estados Unidos. El navegante cayó al agua el domingo 12 de julio del 2020. Foto: Captura de pantalla
Pete Joyce, un experimentado kayakista, exploraba el río de Carolina del Norte, en Estados Unidos, cuando sintió un golpe intempestivo contra su bote. El impacto lo arrojó al agua, aunque su habilidad le permitió sostenerse con algunas ramas para evitar que el bote se volcara. Cuando giró su mirada hacia la izquierda observó el causante del choque: era un cocodrilo que no dejaba de embestirlo.
El incidente, ocurrido el domingo 12 de julio del 2020, quedó registrado en el lente de una pequeña cámara que el deportista llevaba en el pecho.
Las imágenes dan cuenta de un tranquilo recorrido por el río, cobijado por un vasto bosque, cuando el reptil aparece en escena y golpea la parte frontal del bote. Lo siguiente que se observa son algas entre el agua y la respiración agitada del hombre, que lucha por estabilizarse.
“El video realmente no hace justicia al impacto porque golpeó lo suficiente como para que pudiera desplazar mi equilibrio y ahí es donde comencé a rodar”, dijo Joyce, bombero y paramédico, en diálogo con el medio de comunicación Fox Carolina.
Video: YouTube, cuenta: Pedro Jose aka Peter Joyce
Cuando logró seguir su paseo, relató Joyce, pensó que lo que lo impactó fue un pez que saltó cerca de la orilla. “En realidad cuando estaba a unos tres pies del costado del bote es cuando realmente vi bien la cabeza”, señaló. El navegante dijo, además, que, en medio de la colisión, “no hay tiempo suficiente para reaccionar”.
Tras el encuentro con el cocodrilo, el hombre afirmó que no lo volvió a ver, aunque sí lo sintió rozar el fondo de su bote mientras nadaba. Fue en ese momento cuando sintió la adrenalina en su cuerpo; tenía miedo. Entonces, decidió golpear el costado de su kayak tres veces, con la esperanza que el animal se asustara.
Pensó que el cocodrilo podría atacarlo de nuevo, por lo que respiró profundamente, agarró su remo y salió de la zona tan rápido como pudo.
Alicia Davis, bióloga de caimanes de la Comisión de Recursos de Vida Silvestre de Carolina del Norte, dijo -consultada por Fox News- que el caimán probablemente también estaba asustado y se fue en la otra dirección.
Asimismo, la especialista explicó que los reptiles no suelen representar gran amenaza para los humanos. Sin embargo, los problemas surgen cuando las personas los alimentan o dejan que las mascotas se acerquen demasiado al borde del agua.