En el Centro Cultural Mama Cuchara, en el Teatro Variedades o en el Sucre, por más de cuatro semanas se han extendido los ensayos en miras del estreno de la zarzuela ‘Luisa Fernanda’, a realizarse este jueves 21, a las 20:30.
En estos días, sobre el escenario, suenan los instrumentos y las voces, bajo la batuta del colombiano Juan Carlos Rivas. De rato en rato, se detiene la interpretación y es necesaria una anotación sobre la partitura, una corrección en las claves dibujadas en el pentagrama o una petición de mayor fuerza y entrega.
Todo parece señalar que el director tiene carisma, empatía con los músicos, sonríe y exige disciplina por igual, entre sus movimientos en el podio alterna alguna broma… después, la música vuelve a sonar. Puede ser la habanera de ‘El soldadito’ o, acaso, ‘La mazurca de las sombrillas’, dos piezas reconocidas de ‘Luisa Fernanda’.
Esta zarzuela, compuesta por Federico Moreno Torroba, con libreto de Federico Romero y Guillermo Fernández Shaw, fue estrenada en la tablas del Teatro Calderón de Madrid, el 26 de marzo de 1932.
Ahora, la ejecución musical recae en una orquesta conformada especialmente para este montaje; hay músicos de varias agrupaciones : la Filarmónica, la Juvenil, la Sinfónica. Ellos y sus instrumentos deben sortear las exigencias de la partitura, buscar el balance en sus sonidos y hallar el color de los personajes y las regiones de España, por donde recorre la obra.
Se trata de una historia de amores y traiciones, de tiempos de guerra y fiesta, de liberales y monárquicos enfrentados en medio de La Gloriosa (revolución que tuvo lugar en 1868, en España y terminó con el derrocamiento de Isabel II). Los personajes reflejan el alma hispana de la época. Ahí están: la bella Luisa Fernanda y su padre Don Florito; Javier y Vidal, enemistados por cuestiones amorosas e ideológicas; la duquesa y la posadera; los revolucionarios, los militares, el pueblo…
Todos interpretados por un elenco de 18 solistas y el Coro Mixto Ciudad de Quito. Cantantes y actores que suman la oportunidad y la experiencia de la zarzuela a su ya amplia trayectoria en estos montajes y con los géneros músico teatrales.
Con los interpretes, los músicos comparten espacio durante los ensayos. Con el personaje en la garganta, se ubican en el escenario, ya sea sobre las tablas, o en un graderío, caminan, buscan posturas y Chía Patiño, directora de la Fundación Teatro Nacional Sucre, guía sus movimientos.
Ella, quien es la directora escénica de ‘Luis Fernanda’, ha optado por un montaje bastante abstracto y poético, que se centra en la historia de los personajes. Ellos tienen vestuarios realistas, pero la escenografía es conceptual y casi no hay utilería, pues se busca que la gente se enfoque en la historia más que en los recursos escénicos, que el espectador vea al personaje y se contagie de su vida, de sus emociones, de sus sentimientos.
Concluido el ensayo, los músicos guardan sus instrumentos y los solistas buscan sus camerinos. En el teatro queda una parte más de este rompecabezas que es el montaje de una zarzuela, se trata del equipo técnico. Ahí permanecen sobre la tramoya o en la cabina, probando luces, armando decorados y preparando el sonido; cuidando que todo esté a punto para alzar el telón…
El estreno es el jueves y una segunda función se hará el sábado, también a las 20:30. El costo de las entradas es de USD 20 y 10.
Entrevista a Chía Patiño / Directora escénica
‘Borramos el prejuicio de que el arte es aburrido’
¿En qué se diferencia la zarzuela de otros géneros escénico musicales?
Se cree que la ópera tiene libros profundos y música más elaborada, y que la zarzuela es popular, ligera, para divertir. Pero, el libro de ‘Luisa Fernanda’ es muy pulido y su orquestación es brillante. La línea que separa la zarzuela de las otras formas es leve: una bronca académica o diferencias idiomáticas (la zarzuela española, la ópera italiana y la opereta francesa).
¿Este montaje, al igual que los anteriores de la FTNS(‘Elíxir de amor’ y ‘Sweeney Todd’), se presenta como más accesible?
Sí, en este año trajimos géneros que la gente desconoce, y se aventura. Son de fácil digestión, pero en el sentido de que te llegan rectito al corazón.
Así llegan a más gente…
Borramos el prejuicio de que el arte es aburrido. Son géneros maravillosos, que comunican, ponen todo en escena y abren una puerta para que la gente los conozca y disfrute.
Aquí, ¿el público es crítico, formado o espontáneo?
Una mezcla de los tres. Hay quienes sienten y reaccionan de inmediato, otros vienen a menudo y se forman, y la crítica juzgará. Además, empezamos a ganar nuevos públicos.
¿Por qué las temporadas son tan cortas?
Es un arte caro. Se trata de mantener 100 personas sobre el escenario cada noche, con vestuario y demás recursos.