Interpretaciones como el Toro barroso y el Chulla quiteño levantaron de su asientos al público de Santo Domingo de los Tsáchilas. La euforia provocó un baile no programado por la Orquesta de Instrumentos Andinos.
Unas mil personas concurrieron al Parque de la Juventud, que fue el escenario desde donde el maestro Patricio Mantilla dirigió a los 35 músicos que conforman Orquesta (creada en 1990 y que forma parte de la Fundación Teatro Nacional Sucre).
Rondadores, dulzainas, ocarinas, payas, pingullos y zampoña entonaron La pollera colorada, que fue la canción que entusiasmó a los asistentes.
Por breves momentos la nostalgia invadió a los presentes cuando Mantilla combinó la dirección de la Orquesta con su interpretación vocal del tema Vasija de barro.
El público recuperó la alegría con temas afroecuatorianos interpretados con los instrumentos de percusión como el bombo, marimba, bongós y los timbales.
Uno de los integrantes de la Orquesta, Luis Sánchez De La Vega, hizo un alto durante el concierto para comentar con el público que la marimba, es usada por la nacionalidad Tsáchila. La noche continúo al ritmo de temas como El Carpuela. La presentación duró alrededor de 90 minutos. Sánchez De la Vega también explicó que la Orquesta pone en escena la música ecuatoriana, conservando su identidad.
Este grupo de músicos recoge lo más representativo de los temas latinoamericanos dotándolos de una expresividad particular. “La intención es integrar el sinnúmero de ritmos de nuestro país”. Sin embargo, la Orquesta además interpreta música barroca, clásica y contemporánea de compositores, como Bach, Mozart, Beethoven, Villalobos, Piazzolla…
La presentación estuvo a cargo del Gobierno Provincial y la Fundación Teatro Nacional Sucre.