La boca de Santiago Guillermo, de 25 años, se convirtió en sus manos. Con ella pinta al óleo sus obras de arte. Guillermo camina pausado y sus manos son rígidas porque tiene un problema congénito de artrogriposis (articulaciones curvas y movimientos limitados).
Su enfermedad le impide dibujar con sus manos. El cuencano recuerda que por curiosidad y jugando una vez, a sus cinco años, tomó un pincel y le llevó a su boca para hacer garabatos y con el paso del tiempo aprendió a pintar.Allí descubrió que tenía la habilidad de pintar con el pincel en la boca y empezó a practicar todos los días en su casa haciendo caricaturas, dibujos animados y retratando a su papá.
Por su dedicación al poco tiempo participó en un concurso en su escuela Rafael Aguilar, donde obtuvo una mención de honor por colorear un mantel. Este premio le motivó para continuar pintando y participar todos los años.
En la memoria de Guillermo está presente las veces que hizo caer los frascos de acuarelas porque se le resbalaban cuando intentaba introducir el pincel.
Él no solo tuvo que aprender a pintar con el pincel, sino a escribir para poder culminar sus estudios primarios y secundarios. Para escribir debe colocar el cuaderno entre sus piernas y tratar de mover sus manos, lo que le resulta difícil, por eso usa la boca.
Este joven pinta en su cuarto. Allí tiene tres caballetes, una silla giratoria que en su asiento y en el piso de cemento tiene una manta para minimizar el frío.
En este espacio pasa unas cinco horas como mínimo. Su única compañía es un radio en el que escucha música ambiental, electrónica o baladas que le relajan y le ayudan a concentrarse.
Guillermo cuenta que a sus 19 años ganó una beca para un curso en el CDI, donde recibió 40 horas de clases con el maestro Fernando Suárez. Al lapso de un año asistió a un curso con la artista plástica Eudoxia Estrella.
Con Estrella aprendió la técnica de los matices, fondos, texturas y hacer retratos. Según la acuarelista, Guillermo nació con el don de pintar y por ello es un artista nato, razón por la que su enseñanza solo fue en la técnica .
Estrella define el trabajo del artista como hiperrealismo porque sus obras es como si se pudieran tocar. El pintor cuencano, Ricardo Montesinos, coincide con Estrella. Él recuerda que cuando vio la primera vez una de sus obras se quedó impresionado.