De rumor en Twitter a una noticia ‘oficial’

No es la primera vez que Twitter ‘mata’ a un artista. Sucedió con Michael Jackson en junio del 2009, con Mercedes Sosa en octubre de ese mismo año y, esta semana, con Luis Miguel y Cerati.

fakeFCKRemoveEn unos casos ha acertado –adelantándose por horas a agencias y medios de comunicación- y en otros no ha pasado de simples especulaciones. Pero, ¿desde cuándo un rumor que circula en ese ‘microblogging’ pasó a ser noticia?

La supuesta muerte de Luis Miguel captó la atención de los medios de América Latina. En ediciones digitales e impresas, con distintos ejes, replicaron los rumores de miles de fans que hablaban de su deceso en Twitter.

“Eso está mal. (') Me parece bastante tendencioso sacar una nota que diga ‘Twitter dice que Luis Miguel ha muerto’. Eso es una manera de dar crédito a estos rumores”, opina Esther Vargas, editora de Ciudad de Perú.21 y máster en Periodismo Digital.

Para Vargas, esta práctica se ha vuelto frecuente, y da tráfico a las web de noticias. “Creo que eso es un error y una manera muy fácil de aprovechar esta red social”.

Eduardo Arcos, bloguero ecuatoriano radicado en Madrid y twittero, ha visto cómo la ola de rumores no solo se desata con farándula. “Se me vienen a la mente los rumores de lanzamientos de productos nuevos de Apple, una práctica que literalmente fascina a los fanáticos de la marca”.

Arcos dice que a diario se mata a alguien en redes sociales y siempre ha pasado, aunque ahora hay un cambio de medio: “del boca a boca en el mundo real, a las redes sociales en el mundo virtual”.

Isaac Vásquez, responsable de la gestión de las redes sociales en El Universal de México, dice que sacar notas con información de Twitter es una práctica oportunista, pero también ve un avance: ahora los medios ponen atención a lo que se dice en la web. “Pero los medios tienen el deber de corroborar esa información y, en su caso, mejorar la técnica para definir que la información sea verídica”.

Vargas y Vásquez coinciden en que la verificación es la tarea fundamental del periodista y, además, ese trabajo crece al tener a Twitter, una fuente inmensa, inacabable y ruidosa, según Vargas.

A ese criterio se suma Diego Santos, director de Eltiempo.com de Colombia, quien lleva seis meses monitoreando esta red. El pasado fin de semana, Twitter les dio cuatro primicias: el sismo de 5,7 grados en Puerto Rico; la muerte de Ronnie James Dio, ex vocalista de Black Sabbath; el ingreso de Cerati a una clínica; y la polémica por un tema de Juanes en la campaña de Juan Manuel Santos.

En el caso de Puerto Rico, Santos dice que en la madrugada del domingo leyó una centena de tweets sobre el temblor. Así tuvo la certeza de que las alertas eran confiables y colgó la información en su sitio. Lo que espera la gente de los periodistas es que nosotros verifiquemos las noticias, que cuando nosotros informemos sobre algo, ya esté comprobado que sea un hecho real”, añade.

Paúl Barahona, lector y usuario activo de Twitter en el Ecuador, busca que un medio use el eco, pero informe más. “Siempre se tiene una responsabilidad al publicar algo y hay que afrontarla. Hay que ampliar la noticia y corregirla”. Él espera que un periodista sepa combinar la investigación con la inmediatez y que comparta las noticias en tiempo real.

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