Recibido con aplausos, al final de la charla con Roberto Pombo, director de El Tiempo, Rubén Blades cantó ‘Adán García’ y la gente coreó con él. Así, el cantautor panameño dio inicio la noche del jueves al Hay Festival, en Cartagena.
“Somos testigos, protagonistas y nuestra función como artistas es narrar una historia común”, dijo Blades, con sencillez y gracia. También que sus discos “son como la leche, tienen fecha de expiración, pues los temas vienen y van, son parte de la realidad y ayudan a sentirnos menos solos”.
Contó su vida, así como quien no quiere la cosa, recordando sus primeros años, esos difíciles cuando el empleo no se veía por ningún lado. O que desde niño escribía cuentos, historias que se iban volviendo versos, versos que se iban sumando y terminaban en canciones.
Antes de decidirse por la música o la abogacía, el panameño trabajó y estudió con detalle una colonia penal: “Me interesaba el porqué de la conducta criminal”. De ahí saldrían, más tarde, varias canciones, como Pedro Navaja, o El Cazanguero. El Tiempo, Colombia, GDA