Extraña, de entrada, la ausencia de color. El tema, sencillo pero no simple, exige al perceptor alejarse por un momento de sus pensamientos cotidianos, para insertarse en el alma de los árboles. Su presencia, pero también su ausencia está representada en la muestra de la artista ecuatoriana Elena Lanham, quien se exhibe su trabajo hasta el 4 de enero de 2013 en el Centro Cultural Benjamín Carrión.
En el año 97, según cuenta la artista, realizó una exposición en color con un tema parecido, motivado por el violento crecimiento urbano de Quito. Esta vez se decidió por la tinta china, para evocar en el espectador la tristeza y nostalgia que motivaron su trabajo. Una tristeza que tiene que ver con la ausencia, no solamente de árboles, que se pierden a diario en Quito y sus alrededores, sino también la que provocó su estadía de casi 20 años fuera del país.
Al volver después de tanto tiempo, para ella es más evidente el cambio que ha sufrido la ciudad, que cada vez tiene menos árboles. Por eso tituló a la muestra ‘Lamentando la ausencia’, unificando así su percepción con un hecho evidente.
Algunos de sus cuadros son ‘texturas que fluyen’, como los describe la artista, a quien fascina el diseño. No solamente el luto, representado por el duro negro de la tinta china, sino también los ‘Sobrevivientes’, representados por un árbol pequeño rodeado de blanco, aparecen en la exposición. La idea no es sólo evocar tristeza, sino despertar la sensibilidad con un poco de esperanza.
En arte digital, se exhiben dos sobreimpresiones en las que aparecen los árboles con el edificio que los reemplaza. Según Lanham, la idea es evidenciar al mismo tiempo la pérdida de los espacios verdes y el crecimiento urbano. Todo ello, con una idea de base: Less is more (menos es más).
Para cerrar su muestra, la artista ha pedido a los asistentes que dibujen un árbol en un lienzo ubicado para ese efecto, “algo así como plantar un árbol virtualmente”. Y espera que la idea de cuidar un árbol marque a la gente.