El Festival Internacional Escenarios del Mundo este año se hará entre el 26 de septiembre y el 10 de octubre, en Cuenca. Desde hace seis años, el director del Festival, Juan Andrade Polo, debe empezar cada vez desde cero cuando se trata de montar el festival del próximo año. Como él dice, al parecer los frutos comprobados de su gestión no sirven de mucho a la hora de contar con el apoyo de instituciones públicas, principalmente.
Para este festival, luego de mucho bregar, consiguió finalmente -de palabra- el apoyo del Municipio de Cuenca, que era el que le hacía falta para concretar con los artistas.
Con miras a una próxima edición, Andrade propone que este año las instituciones públicas evalúen ‘in situ’ el desempeño y el aporte de ‘Escenarios del Mundo’, para así, en caso de que la evaluación sea favorable, establecer mecanismos de cooperación que fluyan sin tanta tramitología.
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¿Cuál es la situación?
Han sido años de hacer el Festival y de tener resultados muy positivos. Hemos logrado tener un público cercano a las 35 000 personas, en todos estos años. Arrancamos en Cuenca y luego nos extendimos hacia Loja, Azogues y a ocho cantones del Azuay. Y a pesar de estos resultados, el 80% de nuestros esfuerzos consiste en conseguir el dinero.
¿No reciben apoyo del Estado?
Sí, el Ministerio de Cultura aporta con USD 20 000.
Pero…
Los 15 días de Festival cuestan unos USD 150 000.
¿Y el resto?
Hemos encontrado apoyo en la Embajada de Suiza, en la Embajada de España y en el Consulado de Brasil.
¿Usted, qué propone?
El monto debería ser mejorado en relación a lo que nosotros estamos consiguiendo. Ese dinero no nos alcanza y cada vez tenemos la incertidumbre de qué es lo que va a pasar.
¿Siempre es así?
Siempre. Cada año empezamos de cero porque las evaluaciones (más de papeleo que de calidad de las obras) de lo que uno hace no están ligadas a lo que se hizo el año anterior.
¿Cuál es la solución?
Debe haber una evaluación real de lo que ocurre en los festivales, yendo a los eventos, viendo los resultados.
¿Y qué quisieran?
Darle una mayor sostenibilidad a las asignaciones de recursos en relación al tipo de festival que sea, porque hay festivales grandes, con programación destacada, que llegan a grandes públicos y tienen el mismo tratamiento que un festival pequeño.
Después de esto, ¿se hace este año el Festival?
Ha sido duro; seguimos en la cuerda floja. Pero sí se hace.