Los tres patios de un caserón que se ubica en la calle García Moreno servirán de motivación para que Pablo Cardoso realice una intervención artística en septiembre. Los tres espacios fueron construidos en 1650.
fakeFCKRemoveAl igual que en la Casa del Higo, que precisamente se encuentra al lado, en los patios se pueden hallar árboles que fueron plantados en el siglo XVII. Piletas, abrevaderos, tejas, piso empedrado y una serie de elementos coloniales marcan la edificación.
Aunque en la construcción ya se han realizado intervenciones y algunas adecuaciones, para Cardoso, estos materiales podrían marcar una parte de la pauta por la que desearía direccionar su arte. Pero lo que más le llama la atención es la historia que esta contiene desde aquella época.
Varias familias han pasado por allí; no se sabe con certeza cuántas, pero Cecilia Oña vive allí ya casi 20 años. Conoce la mayoría de acontecimientos que sucedieron en el sitio desde la Colonia.
Mientras pasea por los alrededores del lugar a desnivel, Oña cuenta que allí se hospedó el poeta francés Henri Michaux. A Cardoso eso le parece fascinante, pues el poeta y también pintor escribió ‘El diario de viaje’ en el que narró experiencias en Ecuador.
Justamente parte de la historia de la casa está en el libro. Es probable que con ella Cardoso cree elementos para realizar la intervención. Aún no está seguro.
Las más de 80 gradas que posee el caserón tienen más anécdotas. El sevillano José de Zuleta Reales, Alfredo Gangotena, entre otros personajes, dieron vida al espacio en donde desde sus altillos se observan paisajes de Quito.
La Virgen del Panecillo, La Tola, el Itchimbía, La Basílica y parte del centro se puede apreciar desde arriba, lugar adecuado recientemente. Cardoso asegura que mentalizará el proyecto. Para el artista es un reto que deberá plasmarse en un par de meses cuando viaje de Cuenca a Quito. Pero antes realizará visitas previas para retocar su creatividad.