Mientras se instalaban sus fotografías en el Centro Cultural Metropolitano, el miércoles pasado, Pedro Meyer observaba el partido España-Alemania y a la vez conversaba con este Diario.
¿Qué es lo que cuestionan sus fotografías?
Cada una de mis fotos tiene su propia historia, distinta de la otra. La obra en su conjunto cuestiona la manera en que hemos entendido a la fotografía desde que nació hasta que empezó la era digital. Cuestiona la noción de la fotografía, no una particularidad.
¿Cuál es esa noción sobre la fotografía?Es solo una interpretación de la realidad; pedazos de ella. Siempre se ha entendido que es una representación de la realidad y yo digo que no. Las fotos identifican lo que uno considera importante, la historia que se quiere contar. Si pones a cinco fotógrafos que tomen una fotografía, los cinco sacarán realidades distintas. Hay una verdad pero son cinco interpretaciones.
¿Es ortodoxa a la fotografía documental?
No. Se le ha querido dar ese nombre. Pero se puede decir que la gran mayoría de las fotos más famosas son posadas.
¿Por qué entonces la etiqueta de ‘Hereje’?
Por ser alguien que cuestiona. Y que cuestiona justamente la ortodoxia, la manera tradicional de pensar. Hay que pensar de una manera distinta con respecto a todas las cosas.
¿Qué buscaba con el primer CD ROM, combinando imágenes y sonidos?
Eso fue muy interesante. Yo hice el primer audiovisual que se realizó en México. El equipo que se necesitaba era muy complejo. Al darme cuenta de que podían haber otros métodos que se podían mover y utilizar mejor fue increíble. Después fue pasando del CD ROM a la Internet y así. La posibilidad de publicar y realizar el trabajo así fue lo mejor.
¿Pionero de la foto digital?
Sí.
¿Cuál fue su afán con el portal Zone Zero?
Fue en principio llevar los primeros 15 años de lo analógico a lo digital, eso ya se cumplió. Ahora estamos en una etapa distinta, la de entender todas la nuevas tecnologías al servicio del discurso de la fotografía y a dónde podemos llegar.
¿En algún momento su sueño fue ser solo un fotógrafo de cuarto oscuro?
Bueno sí, porque era lo único que había cuando empecé a los 11 años. Allí el horizonte nada más era el cuarto oscuro. Lejos estaba pensar en todas las posibilidades digitales.
¿En qué momento cambió ese horizonte?
Al darme cuenta de la existencias de una fotografía diferente. De lo que podría ofrecerme la foto digital y todo su contexto.
¿Cómo redefine al concepto de exhibición fotográfica?
En primer lugar ya no concibo una exhibición en una galería o sitios físicos con fotos pequeñas. Para tener fotos pequeñas tienes la pantalla de una computadora. Aquí, el hecho de que estén impresas dan una relación del público frente a la obra. Son experiencias distintas.
¿‘Herejías’, resultado de…?
Un selección de tres curadores, entre ellos la Aduana del Ecuador, las fotos que verán son escogidas por ellos, contó riendo.