El ensayo, género completo cuando está bien estructurado, flamea imponente en el libro ‘Los marcapasos’, de Lupe Rumazo. Lo hace porque con lenguaje preciso y alta erudición, la autora se inserta en los procesos sociales y culturales del país y la región, no solo para analizarlos, sino para proponer reflexiones y sentar las bases de novedosos y profundos debates.
Dado que el estudio de la cultura no puede ser unívoco, la escritura de Lupe Rumazo se transmuta según el orden de cada ensayo. Así es para la refutación, saeta; para la revisión, lupa; para la cantata, celebración. Pero en los textos no cabe el chivatazo, más bien la denuncia seria , no la querella pendenciera, sino el debate abierto.
El libro deja conocer a una ensayista rica en lecturas, que se hace tanto de registros históricos para documentar sus textos, como de las ideas y propuestas de teóricos contemporáneos para atinar en sus tesis. Si Eugenio Espejo, Antonio José de Sucre o Manuela Sáenz están en las páginas de ‘Los marcapasos’, los personajes históricos, sus acciones y contextos son interpelados desde las lecturas de Derrida, Levi-Strauss, Foucault, Fernández Retamar, Leopoldo Zea…
La arquitectura del libro posibilita una lectura continua. Al inicio invita a seguir un rastro cronológico para la andadura de la independencia americana, que va desde una relectura del pensamiento de Espejo hasta el ideario de los libertadores. Aquí se incluye un capítulo sobre la ensayística de Alfonso Rumazo González, padre de la autora, que bien merece lectura y estudio en estos tiempos donde los próceres se han convertido en herramientas de la demagogia.
Siguen en las páginas, perspectivas sobre la actualidad. Ya se trata el rol de la cultura en las relaciones trasatlánticas o el papel de la mujer intelectual, no desde una pobre perspectiva de género, sino desde la labor que han realizado a favor del pensamiento creativo y crítico, o desde la respuesta a la opresión mediante una palabra fuerte.
En otros ensayos referentes a la creación literaria, aparecen los nombres del venezolano Andrés Eloy Blanco, del poeta universal Jorge Carrera Andrade, de Alfredo Pareja Diezcanseco. Lupe Rumazo también ha abierto espacio para hacer un ‘autoensayo’ y trabajar sobre su propia obra de narradora, en la que se incluye el libro: ‘Escalera de piedra’.
‘Los marcapasos’ se inserta en un escaso pero significativo, por potente, conjunto de libros de ensayo escritos desde el ser ecuatoriano, más allá de posturas e ideologías. Y para enriquecer esa lista de nombres, con renovadas visiones y lecturas sobre Latinoamérica, llega el nombre de Lupe Rumazo.