Con esta palabra nos referimos a la persona que monta un caballo y a la que es diestra en equitación. Por su terminación es común en cuanto al género, de modo que para referirse específicamente a una mujer, lo normal y recomendable es usar la forma jinete con determinantes femeninos. El Diccionario Panhispánico de Dudas proporciona este ejemplo: ‘El cansancio afectó el rendimiento de la jinete mexicana’. Es minoritario y desaconsejable el femenino ‘jineta’, usado a veces en algunos países americanos. No hay que olvidar, no obstante, que para la mujer que monta a caballo existe también el término específico amazona.
El Diccionario de Ecuatorianismos define esta grafía como adjetivo que refiere a algo que contiene bastante jugo: caña, duraznos aguachentos, etc. El DRAE la define en este sentido: dicho de la fruta u otro alimento, insípido por exceso de agua. En la segunda acepción significa lleno de agua.
Esta palabra quiere decir ‘iniciar (se) de nuevo’ y se conjuga como anunciar. La norma gramatical respecto a su uso advierte que no debe emplearse con el sentido de reanudar o reemprender. Es muy común en el lenguaje del periodismo deportivo el uso de la expresión ‘se reinicia el partido’ cuando comienza a jugarse el segundo tiempo. Si escribimos se reinicia el partido estaríamos diciendo que comenzó de nuevo, pero lo que se quiere decir es que las acciones se reanudaron luego del descanso del primer tiempo. Para expresar la acción de ‘volver a arrancar el sistema operativo’ de una PC se recomienda reiniciar, no ‘reinicializar’.
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