Señala la escritora Lupe Rumazo, hija del intelectual que convoca este artículo, en su texto ‘Vigencia plena de Alfonso Rumazo González’, que en ella pervive la enseñanza que su padre le legó: “Le invito a ser heroica”.
Ese heroísmo acompañó, desde su nacimiento, un 12 de marzo de 1903, en Latacunga, a las ideas y el accionar de Rumazo González, escritor e historiador ecuatoriano, quien falleció hace 10 años. Para recordar el valor de su pensamiento, sus profundas reflexiones y sus estudios minuciosos, la Academia Nacional de Historia le brindará un homenaje, este miércoles 27, a las 12:00, en el Auditorio Manuel de Guzmán Polanco.
‘Vigencia plena de Alfonso Rumazo González’ será el texto al que se dará lectura en la cita.
Allí su hija hace un recorrido, acompañada de un lenguaje fino y selecto, para constatar la trascendencia de la obra de su padre; y cómo esta ha sido impulso para reconocimiento y estudios que dan continuidad a la labor emprendida por Rumazo.
Tras una temprana orfandad, Rumazo González fue cosechando sus propios logros. Desde joven tuvo un espíritu cuestionador y crítico.
De esos años recordaba sus impresiones, recogidas en el Diccionario Biográfico de Rodolfo Pérez Pimentel: “En 1917 me impresionó el entierro de González Suárez por la cantidad de gente que concurrió y leí el ‘Anticristo’, de Nietszche y desde entonces empecé a mirar con recelo a mis profesores del Seminario, muy mediocres por cierto, por su formación decimonónica, que me enseñaron a subestimar a Rubén Darío, al filósofo Bergson. Nada era válido para ellos sino era español. Por eso tuve que rectificar con esfuerzo y sufrimiento intelectual el camino mal andado”.
Esa decisión, sumada a una fuertísima curiosidad intelectual, lo llevó a sumergirse en libros y tertulias, no sociales sino de ideas; a ser parte del primer grupo América y ha interesarse por la política. Pero su vocación primera fue la que guió sus pasos.
Rumazo González también desarrolló una amplísima faceta como articulista, publicando más de 6 000, en distintos medios escritos de Latinoamérica y Europa. por años fue valioso colaborador de EL COMERCIO, como también lo fue su hija Lupe. En su obra son fundamentales sus estudios sobre lo personajes del proceso independentista americano. Allí rescató y dio valor cierto a dos figuras, antes poco destacadas: Francisco Cruz Miranda y Manuela Sáenz. Su trabajo como biógrafo es completo y ha sido objeto de varios libros, principalmente en Venezuela, país donde se radicó hasta su deceso.
Así también lo ha reconocido Claude Fell, catedrático de la Sorbona: “A sus extraordinarias biografías sobre Francisco de Miranda, Simón Bolívar, José de San Martín, Antonio José de Sucre, Manuela Sáenz, Daniel O’Leary y José Martí, que utilizo y cito constantemente en mis clases en la Sorbona, las recomiendo calurosamente a mis estudiantes como obras de probidad y seriedad históricas”.
Otra figura ponderante en la obra de Rumazo es la de Simón Rodríguez, una inclinación que empata también con la dedicación educadora del historiador. A este pensador le dedicó cuatro libros, ‘Simón Rodríguez’, una biografía; los ensayos ‘El pensamiento educador de Simón Rodríguez’ y ‘El ideario’; y el prólogo a sus ‘Obras completas’.
Del maestro de Bolívar, Rumazo decía que “no se ha captado todavía la extraordinaria originalidad de su pensamiento, que se puede apreciar en su ideario; el hecho de que fuera el verdadero libertador intelectual de América. Simón Rodríguez es un pensador para el porvenir”.
Y sobre el porvenir, Rumazo González también postulaba reflexiones, para estos tiempos vislumbraba “un proceso histórico de unión por intereses económicos. Un hombre menor en todo sentido o sea ausencia de genio y un pueblo también mediatizado”. Desde la ignorancia que nos ampara regresamos a ver su figura y a buscar su pensamiento.