Guayaquil demanda más teatro

En Samborondón.  El Teatro Sánchez Aguilar  se levanta sobre un terreno de  24 000 metros cuadrados.

En Samborondón. El Teatro Sánchez Aguilar se levanta sobre un terreno de 24 000 metros cuadrados.

El Teatro Sánchez Aguilar de Samborondón tendrá la segunda sala más grande de Guayaquil y su zona de influencia. Las 950 butacas que se tiene previsto estrenar en abril del 2012, tan solo son superadas por las 1522 que tiene el Centro Cívico.

El proyecto sale de la cabeza y del bolsillo de Carlos Sánchez Aguilar, empresario oriundo de Zaruma (El Oro) que le puso su nombre al teatro ubicado en el Km. 1,5 de la vía La Puntilla Samborondón. El monto de la inversión no se reveló.

Para los promotores teatrales, la inauguración del teatro en Samborondón llega en el mejor momento. El 2011 culminó con un incremento en la demanda en las salas de teatros locales.

El Teatro Centro de Arte, inaugurado en 1988, cuenta con una sala principal de 869 asientos y una experimental de 250. En el 2011 tuvo una acogida inusitada del público. “Muchas presentaciones estuvieron completamente llenas”, cuenta Dolores Barreta del departamento de Difusión del Teatro Centro de Arte.

La inversión de cerca de USD 100 mil para traer a los 85 músicos de la Orquesta Sinfónica Académica de San Petersburgo, en agosto del año pasado, valió la pena. A pesar de los altos precios (USD 90 y 120), el público agotó las entradas.

Lo mismo ocurrió con las obras que, en el 2011, el dramaturgo guayaquileño Jaime Tamariz presentó ahí. Tanto para ‘Alguien voló sobre el nido del cuco’ (24, 25 y 26 de junio) como para ‘La gata sobre el tejado’ (22, 23 y 24 de octubre) no hubo una sola silla disponible. Para los niños cantores de Viena, traídos por O. R. Producciones, las entradas se acabaron con semanas de anticipación.

“El Teatro Sánchez Aguilar promoverá el desarrollo artístico en la ciudad. Eso es positivo para nosotros también”, considera Mónica Cuesta, quien se encarga de traer a los grupos que se presentan en el Teatro Centro de Arte.

El Centro Cívico es otro de los espacios culturales clásicos de Guayaquil. Está ubicado en el sur y es el más grande de todos. Tiene 1 522 butacas. Su construcción empezó en 1970 y concluyó en 1990. Funcionó hasta el 2001. Los ocho años siguientes permaneció cerrado. En el 2009 se remodelaron las instalaciones y se lo reinauguró el Ministerio Cultura. En el 2011, según Gorki Elizalde (Director Ejecutivo de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, institución que administra el teatro), se han presentado cerca de 300 actos. Por ser gratuitos el público ha colmado la mayoría de presentaciones.

Los cantantes georgianos de Ensamble Rustavi se presentaron ahí en noviembre del año pasado. “Fueron 3000 personas, pero solo teníamos espacio para la mitad. Tuvieron que quedarse afuera”.

Elizalde opina que la construcción de más teatros no constituye una competencia, sino un apoyo.

La Casa de la Cultura Núcleo Guayas tiene desde 1952, en el actual edificio ubicado en el centro de Guayaquil, una sala teatral con 415 butacas. En el 2003, se le dio al escenario el nombre de José‘Pipo’ Martínez Queirolo, uno de los dramaturgos más importantes que ha tenido el país.

En agosto del año pasado fueron anfitriones del IV Festival José Martínez Queirolo, con la participación de cinco grupos teatrales.

“Hay un interés muy importante sobre la actividad teatral. Ojalá que el costo de los boletos en el Teatro Sánchez Aguilar sea accesible a todo tipo de público”, aspira Rosa Amelia Alvarado, presidenta de la Casa de la Cultura, núcleo de Guayas.

Al Centro Cultural Sarao, ubicado en una zona residencial en el norte, el año pasado, según su fundador (en 1988) y director artístico, Lucho Mueckay, llegaron unas 10 000 personas. La sala tiene capacidad para 120 espectadores.

El Teatro El Ángel es otro de los espacios, en Urdesa. Fue fundado en 1994 y tiene capacidad para 155 personas sentadas (o “180 apretadas, con sillas adicionales”, según Oswaldo Segura, miembro del grupo teatral La Mueca, propietario de la sala).

El 2011 para la sala se resume en dos palabras: ‘Pareja Segura’, la obra interpretada por Segura y Sandra Pareja que batió récord. Estuvo once meses en cartelera .

“Yo no creo que exista un público teatral tan grande como para las instalaciones del Sánchez Aguilar. Nosotros nos mantenemos en cartelera porque nuestra salita es pequeña”, opina Oswaldo Segura.

En construcción

El nuevo  teatro contará con equipamiento extranjero de última tecnología para acústica, iluminación escénica, tramoya y sonido.   
 
Ramón Barranco  (director artístico del  teatro) se encuentra recorriendo Quito, Cuenca y Manta para conversar con grupos artísticos de esas ciudades.

Tener programación  fija de martes a domingo  y  traer espectáculos internacionales  son  las metas del Teatro Sánchez Aguilar. Tiene una sala experimental para 150 invitados.

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