Esta es una palabra de origen quechua (kancha) que se ha extendido prácticamente por todos los países de habla hispana. La primera acepción del Diccionario de la Real Academia Española (DRAE) dice: ‘Espacio destinado a la práctica de ciertos deportes o espectáculos’. En el Diccionario de Ecuatorianismos del académico Carlos Joaquín Córdova también se usa la expresión ‘tener cancha’, que sirve para ponderar la experiencia de un deportista en encuentros diversos y desenvoltura y confianza ante el público. ‘Abrirse cancha’, dice el DRAE, es pedir que abran paso.
Trucho
En nuestro país se conoce como trucho a algo de baja calidad, que es falso, fraudulento, clandestino o ilegal. También a una persona que es inescrupulosa, mentirosa o poco confiable, que hace todo por las vías ilegales. Se usa también como verbo truchar, que significa adulterar, falsear algo, mentir o engañar. Como sustantivo, el vocablo truchada, se usa para señalar un hecho característico realizado por una persona trucha. Ejemplos: ‘Ese tipo es trucho’, ‘Se encontraron varios conductores con licencias truchas’, ‘Ese libro es una truchada del plagiador’.