El estuco veneciano tiene la apariencia rocosa y deslumbrante como el mármol luego de su aplicación. “Esta se asemeja e intenta recrear la técnica italiana para decorar superficies”, dice Roberto Mancero, de Pinturas Cóndor. Tanto en paredes interiores como en exteriores es posible experimentar los resultados. Pero hay que fijarse en el tipo de estuco que se va a usar.Actualmente la tendencia apunta a utilizar el estuco veneciano. El secreto del estuco veneciano, asegura Mancero, es “la asimetría de las formas que se hagan luego de dar dos pasadas del producto”. Es recomendable pero, agrega el pintor Pedro González, que la aplicación del producto la realice un profesional. “Expocolor ofrece la línea Toscana, que tiene una consistencia suave, cremosa, con brillo y resistencia al agua. En colores pasteles y fuertes, la empresa presenta una gran variedad de tonos que se preparan de acuerdo con el efecto que se pretenda dar”, señala. Pintulac también ofrece la marca española Monto. El “marmorino” es el más adecuado para superficies expuestas a la intemperie. Y para interiores, el “paladio” de Monto actúa con reflejo brillante y tonos resaltados cuando está listo. Para conseguir el acabado deseado, dice María Augusta Silva, asesora de Expocolor, hay que pasar una mano uniforme de Cóndor estuco, para dejar la superficie totalmente lisa. Después, se aplica en forma regular una mano del estuco veneciano.“Para esto se utiliza una llana de acero inoxidable y puntas redondeadas que evitan que la pared se raye. Cuando el área está bien seca se le da el efecto con la espátula que también debe ser de acero inoxidable. La idea es obtener una pared brillante”, añade Silva.Las empresas asesoran a los clientes sobre cada técnica. Los productos vienen listos para colocarse.