Antonio Ante es un cantón vecino de Ibarra. Está a menos de 15 minutos en carro de la capital imbabureña. Es una zona reconocida por su clima primaveral, la calidez de sus habitantes y la tranquilidad de su entorno.
Una de sus dos parroquias, Atuntaqui, se recuesta sobre la carretera Panamericana Norte y es famosa por su desarrollo textil. En esta pequeña y atractiva comunidad se pueden encontrar artículos relacionados con los tejidos de algodón, lino y otros materiales; y a precios más económicos que en otros lugares. Por eso es visitada con asiduidad -sobre todo los fines de semana- por muchos turistas nacionales y extranjeros.
Junto a Natabuela, la otra parroquia del cantón Ante, Atuntaqui es una zona muy buscada por los extranjeros -muchos de la tercera edad- para fijar sus residencias permanentes. Claro, esos argumentos también han convencido a muchos connacionales, quienes han elegido vivir para siempre en ese edén del norte del país.
Esta tendencia, obviamente, ha elevado los requerimientos inmobiliarios de la zona. Varios conjuntos enmarcados en esos parámetros se han levantado en los tres últimos años en la zona.
Uno de ellos es Conjunto Privado La Pradera, que está emplazado en la calle Luis Homero Játiva, entre av. Luis Leoro Franco y Panamericana Norte, tras las Fritadas Amazonas, un ícono de esa pequeña urbe.
Como explica Ana Gabriela Merizalde, de Construcciones Imbavivienda, son inmuebles levantados con los más altos niveles de calidad, con una arquitectura sugestiva y una distribución espacial muy confortable. Las unidades habitacionales, continúa Merizalde, son entregadas con todos los equipamientos, seguridad y servicios que un condominio de esa envergadura ofrece.
El área construida abarca 37 casas de dos plantas y con dos superficies: 115 y 150 m².
Tanto la distribución espacial como los acabados (de primera categoría) sirven para que las unidades habitacionales sean funcionales, amplias y llenas de luz y ventilación naturales.
Los precios por casa varían desde USD 65 000. Las personas interesadas en adquirir una unidad pueden separarlas con un depósito de USD 3 000.
El financiamiento para el resto del capital es flexible e incluye planes que ofrecen entidades bancarias como el Biess o cualesquiera de las instituciones financieras del país. La primera etapa de la Pradera se entregará en septiembre del 2012.
La distribución de la casa de 112 m² sigue el modelo norteamericano. En la planta baja hay un porche, sala-comedor, estudio, cocina con desayunador, el baño social, un garaje para dos autos y los patios delantero y posterior. En la planta alta se distribuyen dos dormitorios con baño compartido, una alcoba máster con baño y una salita de estar.
Las unidades de 150 m² incluyen, además del equipamiento anterior, un vestidor y un cuarto de máquinas en la planta baja; y dos balcones en la segunda.