Las bancas o bancos tradicionales ya no son los hermanos pobres de los otros muebles en la decoración actual. Han evolucionado para convertirse en protagonistas del diseño interior, comenta la diseñadora de interiores colombiana Ana María Pinzón.
“Son versátiles, modernos y funcionales”, asegura la diseñadora, quien considera los bancos rígidos como los nuevos ‘comodines’ de la decoración
Cuando el problema es de espacio, nada mejor que un banco para optimizar el uso del ambiente.
“Son versátiles porque permiten marcar un espacio, se pueden ubicar en cualquier sitio y se les mueve a voluntad y necesidad”, indica Pinzón. Por eso están de moda y los hay en todos los estilos
“Son elementos que, usados puntualmente se convierten en el toque diferencial del ambiente en términos de decoración, por eso se usan en tonos diferentes como cuero de vaca, rojos, verdes, amarillos o azules fuertes, como puntos focales”, indica la gerenta de Simmetrica.com.
La ventaja es que en el momento en que el tono canse la vista es posible cambiarlo fácilmente y renovar el ambiente. Así, se pueden usar como mesa auxiliar para la sala, para sentarse, como mesa de centro, banquillo descansa pies o mesa de trabajo, complementa el arquitecto y diseñador guayaquileño Marcelo López.
Aunque hay de todos los tamaños, formas y colores, el más funcional es aquel de 50 por 50 centímetros y 40 de alto, muy similar a los muebles convencionales, explica la arquitecta María Valle.
Las formas cuadradas y rectangulares son las más versátiles en el sentido de que siempre hay dónde ponerlos, ocupan poco espacio y pueden ser usados por más de una persona, agrega Pinzón
Los bancos de madera antiguos son piezas que pueden ser recuperadas para su uso, tanto en un jardín como en interiores.
Las bancas de madera aportan gran calidez al ambiente y, como elemento de decoración, su función no se ciñe a la de sentarse, sino que tiene otras múltiples aplicaciones, asevera López.
Para su elección hay que tener muy claro cuál es el local en el que van a ser colocadas, para evitar equivocaciones en cuanto a estilo y a las dimensiones adecuadas.
En recibidores amplios, que generalmente tienen una sensación de ambiente frío y poco aprovechado, la ubicación de una banca de madera con asiento angosto de no más de 40 cm, adornado con cojines y mantas, aporta al espacio una calidez especial, transformando un espacio puramente de paso en un lugar de estar.
El roble es un tipo de madera muy utilizado para estos casos.
En pasillos anchos, en cambio, aporta Varela, suelen utilizarse los bancos de madera largos, como podrían ser los de iglesia.
¿Y del acero, qué? Pues también es muy utilizado, explica Paolo Alcívar, de Stock Constructores de San Rafael, que vende bancas de acero inoxidable de la empresa colombiana Socoda.
Son versátiles, livianas, durables y resisten muy bien a la acción de los agentes naturales, la polución, el esmog y el salitre, que es el principal enemigo.