En El Portal de Grecia los diseños son únicos y con características no convencionales. Foto: Patricio Terán/EL COMERCIO
En la decoración interior, el mobiliario constituye el elemento base, a partir del cual se acoplan diferentes complementos.
Al elegir un modelo de mueble para la casa no siempre será necesario optar por los clásicos diseños, sino que la creatividad puede llevar a dar vida a espacios originales y modernos.
Esto lo corrobora Eduardo Almeida, de El Portal de Grecia, quien sugiere que la casa cuente con muebles únicos, que identifiquen el buen gusto.
Para contribuir con este particular, en este local no se diseñan muebles en serie y se opta por opciones poco comunes y alejadas del mobiliario tradicional.
Un ejemplo de ello es un juego de sala que por su estructura de madera parecería incómodo, pero gracias a la combinación con cojines cubiertos con telas como el cuero, la microfibra o el ‘acuaclean’ (tela lavable) se hacen ideales para una estancia confortable.
Las bases curvas de cada sillón destacan y contrastan con los brazos y patas rectas y, asimismo, con la parte acolchonada de los mismos.
Para Almeida, mientras menos conocido sea un diseño, más valor tiene dentro de la vivienda.
Al hablar de ser recursivos en el diseño, también cuentan los materiales que se usan para crear.
En Studio Noa, las durmientes del ferrocarril se implementan para estilos decorativos modernos, contemporáneos y de alta gama. Así lo indica Ángela Hoyos, jefa de diseño del lugar.
Entre las opciones del estudio de diseño interior, este material se puede acoplar como base de la mesa de centro en una sala o como base de un daybed (sofá ancho y bastante cómodo que puede usarse también como cama de ser necesario).
La inversión en un mobiliario que innove en diseño o materiales dependerá, precisamente, de sus características. Los costos pueden superar los USD 3 000.