La bellorita llena de color los arriates y jardines
Esta planta se desarrolla bien en los climas templados. Para su crecimiento busca los suelos orgánicos.
La bellorita (bellis perennis) es una pequeña especie que se cultiva por su gran floración, que es anual. Sus orígenes son europeos.
Es un vegetal apreciado en la ornamentación ya que produce unas flores multipétalos de gran impacto visual. La gama de colores también es muy variada, pero los tonos más comunes son los blancos, rojos o rosas, con la corola amarilla.
Es una astarácea cuyas flores crecen entre 10 y 15 cm. Necesita de un clima templado y requiere de una exposición a pleno sol para crecer. Si no tiene la luz necesaria puede verse afectada por los hongos (la roya o el oídio).
El riego debe ser moderado. En invierno casi no hace falta y en verano con tres veces semanales basta. Los suelos más aptos para su cultivo son los orgánicos con buen drenaje.
