Alejandría es una nueva propuesta de casas de lujo ubicada en el mejor sector de Santo Domingo: la Avenida Quito a la entrada de la ciudad. La propuesta arquitectónica es de Francisco Robalino, un arquitecto capitalino.
El conjunto habitacional está emplazado en un lote de 900 m². En esta superficie se edificaron dos bloques de tres casas cada uno. Están separados por un acceso vehicular y amplios jardines, en un diseño de tres niveles.
La distribución de las viviendas en un área 185 m² tiene en la planta baja una amplia sala, comedor, baño de visitas, gradas con pasamanos de hierro forjado y cocina tipo americano.
El complejo habitacional tiene estructura sismoresistente. La diferencia entre las viviendas es el número de los estacionamientos. Las unidades localizadas en los extremos cuentan con tres plazas de parqueo. Las intermedias cuentan con un garaje exterior, con cubierta de estructura de aluminio y policarbonato.
Robalino resalta la decoración con muebles bajos y altos, puertas y armarios termolaminados con diseños exclusivos. El mesón está empotrado. En la cocina también resaltan espaciosos gabinetes y sitios para el microonda, el refrigerador y los licores.
En el centro de la cocina se localiza un desayunador de dos niveles con compartimentos en la parte inferior. Un gran domo provee de luz y ventilación natural a este ambiente. Este funciona con un desplazamiento lateral manual y mecánico.
Otro experto constructor, Rodrigo Naranjo, resalta el diseño de la segunda planta. Consta de un cuarto máster y dos dormitorios con sus respectivos clósets y un baño compartido.
En el tercer nivel, en toda el área, un segundo dormitorio máster, amplio clóset localizado al fondo de la habitación, se destacan por su amplitud. Cuenta con espacio para una sala de TV, estudio, un amplio baño con una cabina de hidromasaje, accesorios y grifería importada,
Una pared de cristal provee de iluminación natural a la vez que comunica con un balcón cubierto. Para completar cuenta con una terraza que permite una vista panorámica de la ciudad.
En los acabados no se escatimó costo alguno, dice Robalino. Las mamposterías son de bloque vibro prensado enlucido paleteado y estucado. La pintura en las paredes interiores tiene vivos colores. La pintura exterior es elastómerica. “Tiene la finalidad de dar mayor impermeabilización para protección a las paredes del clima húmedo de la zona” afirma el constructor.
En las fachadas se revistieron los volúmenes más sobresalientes con fachaleta. Las puertas interiores, los muebles de cocina y los dormitorios son de madera termolaminada.
Las puertas exteriores son de aluminio y vidrio. Los portones de ingreso al proyecto y a los parqueaderos son de hierro y automatizadas. La puerta de ingreso principal a la vivienda es de lámina de acero antirrobo.