Las redes sociales de Internet como Facebook y Twitter, y los videojuegos de la web, modifican cada vez más las percepciones de las personas sobre su identidad y el lugar que ocupan en el mundo, según un estudio encargado por el gobierno británico al científico jefe del Reino Unido.
El reporte, titulado “Identidades Futuras” y elaborado por el profesor sir John Beddington, concluyó que las ideas tradicionales de identidad serán cada vez menos significativas con el avance de Internet.
De acuerdo al experto, una de las consecuencias de esta tendencia es que las comunidades se están volviendo menos cohesivas con el tiempo.
El estudio indicó que los cambios podrían ser aprovechados para potenciar efectos positivos, pero en caso de ser ignorados “llevarán a la exclusión social”. “Esto puede ser una fuerza positiva, ejemplificada por la solidaridad vista durante los Juegos Olímpicos de Londres 2012, o también una fuerza de destrucción, como se vio en los disturbios de violencia (de agosto) de 2011 en Londres y otras ciudades inglesas”, destacó el informe.
“Debido al avance de los teléfonos inteligentes, redes sociales y las tendencias hacia una (mayor) conectividad, grupos dispares podrían ser movilizados más fácilmente en caso de coincidir temporalmente con intereses comunes” , agregó.
En ese sentido, dio el ejemplo de los llamados “flashmob” (multitud instantánea), una acción organizada en la que un gran grupo de personas que no se conoce entre sí se reúne de repente en un lugar público, principalmente gracias a la comunicación por Internet y telefónica, realiza algo inusual y luego se dispersa rápidamente.
El reporte destacó que el acceso casi continuo a Internet, también conocido como “hiperconectividad” , llevará a cambios profundos en la sociedad en los próximos diez años.
“La tendencia más dinámica (a la hora de determinar identidades) es la hiperconectividad” , afirmó el profesor Beddington a BBC News.
“La acumulación y el uso de datos del gobierno y del sector privado, el balance de derechos individuales y libertades contra la privacidad y la seguridad, y el tema de cómo resolver la exclusión social se verán afectados por estas tendencias. Espero que la evidencia de este reporte contribuya al proceso de nuevas políticas”, agregó.
El reporte de Beddington fue elaborado en base a 20 informes separados en los que expertos británicos e internacionales evaluaron investigaciones en ciencias de la computación, criminología y ciencias sociales.
Ese trabajo destacó que la naturaleza cambiante de las identidades tendrá implicaciones sustanciales para las comunidades y la integración social.
El estudio también concluyó que los elementos tradicionales que delineaban la identidad de una persona -como la religión, la etnia, el trabajo o la edad- son cada vez menos importantes ante el avance del Internet y las redes sociales por la web.
Por el contrario, y en particular entre los más jóvenes, sus identidades son formadas cada vez más a partir de las interacciones online por redes sociales, o por los roles que encarnan en los videojuegos de la web.
El estudio indicó también que lejos de crear identidades superficiales o de fantasía, como algunos críticos sugieren, en muchos casos estas nuevas tendencias les permiten a las personas
“escapar a preconceptos de identidad de aquellos con quienes interactúan”. Ese fue el caso de personas discapacitadas que admitieron a los científicos que al participar de videojuegos por Internet lograron socializar de igual a igual con otros.
“Internet puede permitir a muchas personas descubrir sus identidades de forma más amplia. Algunas personas tímidas, solitarias o que se sienten menos atractivas descubren que pueden socializar con más éxito y expresarse más libremente online” , continuó la investigación.
El reporte destacó que en 2011 el 60% de los usuarios de Internet eran miembros de algún sitio de red social, un aumento del 43% desde 2007.
Por ello, agregó que habrá un mayor activismo político a través de esos sitios, como se vio en la llamada Primavera Arabe en países como Túnez, Egipto y Libia.
También destacó que se están borrando las fronteras entre identidades sociales y laborales, a medida que fotos y detalles personales se vuelven más públicos en sitios de redes sociales.
El reporte citó un ejemplo hipotético de cómo a un joven se le negó un ascenso laboral luego que su empleador encontró en la web fotos de él alcoholizado de sus días de universitario.
El estudio sostuvo que a medida que disminuye la distinción entre identidades online y reales, “cada vez más delincuentes tratarán de explotar el sistema para robar la identidad de personas a partir de redes sociales, profesionales y financieras” .