La zona del Chocó Andino busca ser un una reserva de biósfera

Tarsicio Granizo, ministro del Ambiente, explica que en esta reserva se encuentran: un área protegida, nueve bosques protectores, tres áreas de importancia para la conservación de las aves, un corredor ecológico del oso andino y se extiende por tres canto

Tarsicio Granizo, ministro del Ambiente, explica que en esta reserva se encuentran: un área protegida, nueve bosques protectores, tres áreas de importancia para la conservación de las aves, un corredor ecológico del oso andino y se extiende por tres canto

Tarsicio Granizo, ministro del Ambiente, explica que en esta reserva se encuentran: un área protegida, nueve bosques protectores, tres áreas de importancia para la conservación de las aves, un corredor ecológico del oso andino y se extiende por tres cantones y 14 parroquias de Pichincha. Foto: Cortesía Ministerio del Ambiente

La zona del Chocó Andino busca ser declarada por la Unesco como área de reserva de biósfera. En una rueda de prensa, que se realizó este miércoles 11 de octubre del 2017, se dio a conocer el expediente técnico que se envió a la organización internacional para el reconocimiento de esta área.

La declaratoria que se busca obtener para esta zona del noroccidente, se otorga a territorios donde el desarrollo de las comunidades tiende a una relación armónica con el entorno natural y el uso de sus recursos.

Gustavo Baroja, prefecto de Pichincha, explica que el área propuesta representa el 30,31% del territorio de la provincia, con una extensión de casi 300 000 hectáreas. Esta reserva, ubicada a 45 minutos de Quito, es además una fuente de agua potable, producción agroecológica y de generación eléctrica.

Cada hectárea de este bosque, dice Baroja, es capaz de absorber hasta 250 toneladas de carbono y alberga una gran cantidad de especies de flora y fauna incluyendo osos de anteojos, el gallo de la peña, el zamarrito pechinegro, tigrillos y una variedad de insectos.

Tarsicio Granizo, ministro del Ambiente, explica que en esta reserva se encuentran: un área protegida, nueve bosques protectores, tres áreas de importancia para la conservación de las aves, un corredor ecológico del oso andino y se extiende por tres cantones y 14 parroquias de Pichincha.

Para Granizo, esta zona demuestra que “es posible desarrollar economías locales sin necesidad del extractivismo”. En este territorio había concesiones mineras, dice el Ministro, pero se ha logrado que, dentro de la reserva de biosfera propuesta, se protejan áreas que tendrían importancia para la industria minera.

Esto va ligado a la pregunta que se incluye en la propuesta de consulta popular referente a la minería. Según Granizo, en este tiempo se ha analizado cuáles son los límites de la minería en el país, y se llegó a la conclusión de que las áreas protegidas representan estos límites.

Si gana el “sí” en la consulta popular, no se podrá llevar a cabo la actividad minera, en ninguna de sus fases, dentro de estas zonas. Si esta área del Chocó Andino es declarada como reserva de biósfera por la Unesco, se la estará protegiendo de la industria extractiva.

Se espera tener un primer pronunciamiento de la Unesco en los primeros meses del 2018 y una respuesta final en junio de 2018. Si es aceptado el pedido, esta zona sería la séptima reserva de biósfera en el país, junto al Parque Nacional Galápagos, Yasuní, Sumaco, Podocarpus- El Cóndor, Macizo del Cajas y Bosque Seco.

Además del Ministerio del Ambiente y de la Prefectura de Pichincha, en este proceso participaron gobiernos parroquiales, la Secretaría de Ambiente del Distrito Metropolitano de Quito, la Mancomunidad del Chocó Andino y organizaciones de la sociedad civil.

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