En el colegio Isaac Newton se realizan concursos de botellas. Con esta práctica lograron recolectar 37493 envases. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
En Ecuador habitan alrededor de 15 millones de ciudadanos y todos producen basura. Una vez que se dejan los desechos en fundas plásticas en la vereda o dentro de un contenedor, muchas veces se ignora su destino.
Cada año, el país genera aproximadamente 4,1 millones de toneladas de residuos, según la Iniciativa Regional para el Reciclaje Inclusivo (IRR). Paula Guerra, voluntaria de ReciVeci y especialista en residuos sólidos, explica que estos residuos se manejan según tres escenarios: su acumulación en botaderos y rellenos; los recicladores que “compiten” con los camiones de basura; y cuando van directamente desde la fuente hasta una empresa de reciclaje.
Para el primer escenario (el más común), de acuerdo con el IRR, del millón de toneladas de residuos sólidos (plástico, papel, vidrio, pilas, etc.) que podrían reciclarse en el país, un 76% no lo logra. En otras palabras, gran parte de la basura potencialmente reciclable es recolectada por camiones e, inmediatamente, depositada en botaderos a cielo abierto o rellenos sanitarios.
En Quito, los residuos son transportados primero a dos zonas de transferencia: Zámbiza y la estación Sur. En estos lugares se acopian los residuos, los compactan y luego los llevan en camiones al punto de disposición final: el relleno sanitario de El Inga. Ahí se acumulan montañas enterradas de plástico, papeles, chatarra, comida… para siempre. En algunos casos, los recicladores ingresan a laborar en la estación de Zámbiza y en botaderos abiertos en el país. De los 221 GAD, 122 operan con botaderos, según el Ministerio del Ambiente.
En el segundo escenario, los recicladores hurgan en las fundas de basura antes de que llegue el camión. Ellos seleccionan los materiales que pueden ser reciclados y los trasladan a una empresa que compre los residuos para procesarlos. Bajo esta modalidad,en el 2014, 20 000 recicladores del país recuperaron más de 124 000 toneladas de material reciclable.
El tercer caso responde a aquellos residuos que acaban transformándose en materia prima, pues la fuente los clasifica directamente, los entrega a los recicladores o empresas de reciclaje o los deposita en contenedores específicos (bajo coordinación del Municipio). Así trabajan algunos colegios de Quito, donde el material es clasificado por estudiantes y padres de familia.
En la capital existen alrededor de 260 puntos limpios donde el papel, el cartón, el plástico, los enlatados y el tetrapak son separados y arrojados a sus respectivos contenedores, según Emaseo. Lo que más se recicla en el país es papel, cartón y plástico; pero lo que más se desecha es la materia orgánica (61% de la basura que se genera en Ecuador).
Si una persona particular quiere reciclar sus desechos -recomienda Guerra- puede contactarse con el reciclador de su barrio o con una empresa recicladora (alrededor de 3 200 firmas en Ecuador) o depositar los desechos en los puntos limpios que se registran en la Web de Emaseo.