Celeste Arboleda cambió sus hábitos de vida desde hace tres meses. Ella tiene 40 años y se sometió a una cirugía para bajar de peso.
Le colocaron un baipás gástrico para solucionar su problema de sobrepeso y de hipertensión.
Es parvularia del Liceo del Valle y hace tres meses pesaba 120 kilos. Su presión arterial era de 170/105 (presión alta). Ella fue atendida en el Hospital Enrique Garcés, en el sur de Quito.
El cirujano Ramiro Guadalupe, quien trató a Arboleda, afirma que este procedimiento quirúrgico recién se está implementando en el país. “Esta operación ya tiene más de 50 años en el mundo. Pero en Ecuador todavía es una cirugía nueva”.
La operación consiste, según explicó Guadalupe, en hacer un reservorio gástrico de comida en el estómago. Es decir, se crea una bolsa estomacal que reduce de 1 700 cm³ de ingesta de alimentos a 50 cm³.
Se colocan grapas para crear esta bolsa, luego se hace un desvío para que los nutrientes no pasen por todo el estómago sino que vayan directamente al intestino delgado. De esta manera se evita una completa absorción de los alimentos, lo cual produce trastornos metabólicos.
Con esto también se reduce la producción de grelina. Esta hormona es la que genera la sensación de hambre y es liberada cuando el estómago está vacío en el torrente sanguíneo.
Esta cirugía dura de dos a tres horas y su costo, en las clínicas particulares, puede variar de USD 8 000 a USD 12 000.
Sin embargo, esta práctica médica se ha implementado en el Hospital del Sur a bajo costo.
Celeste Arboleda cuenta que su operación costó USD 200. “Solo pagué el valor de los insumos médicos”.
Guadalupe trabaja con el doctor Fernando Flores. Ambos realizan las cirugías en el Hospital del Sur para que la gente que acuda a hospitales públicos pueda acceder a esta operación. “Durante este año hemos operado al menos a 100 pacientes”, explica Flores.
Pero ¿quiénes son candidatos idóneos para esta intervención?
Quienes padecen de obesidad, es decir, tienen un exceso de grasa en el organismo, que está determinado por el índice de masa corporal (IMC).
Con un IMC mayor de 40 (obesidad mórbida), los médicos recomiendan que se realice esta intervención. Pero si el paciente presenta un IMC mayor de 35 (obesidad grado II) y, además, enfermedades asociadas como la hipertensión, problemas cardiovasculares, diabetes o problemas en las articulaciones, también deben operarse.
Celeste Arboleda sufría de hipertensión. Pero luego de la cirugía su presión disminuyó a 120/80. “Mi presión es de una joven. Bajé 15 kilos en dos meses. Mi talla de ropa cambió de 22 a 17. Estoy feliz”.
Las personas entre 14 y 65 años pueden someterse al baipás. Un mes antes de la operación, el paciente debe hacer una dieta para bajar el 10% de su sobrepeso. Arboleda cuenta que en su caso bajó seis kilos.
Luego de la intervención, su recuperación tomó dos días. Luego le recomendaron que tenga una dieta balanceada y realice ejercicio. Esto le motivó a bailar una hora diaria. Guadalupe recalca que esta no es una cirugía estética sino de salud. Por esta razón quienes no cumplan con las características de un obeso no pueden ingresar al quirófano.
Seis consejos para una dieta saludable
En una dieta diaria deben predominar los vegetales, sobre todo las hortalizas, las verduras y las legumbres.
La fruta es fuente de vitaminas y minerales. Se debe comer como mínimo dos frutas al día y una de ellas debe ser un cítrico.
Los cereales deben ser consumidos debido que son fuente de fibra, que ayudan a una adecuada digestión de alimentos.
Se debe evitar el consumo frecuente de grasas y de comidas rápidas. Esto incrementa el nivel de colesterol.
Los lácteos tienen un alto contenido en calcio, lo cual mantiene los huesos fuertes y evita la osteoporosis.
Realizar una hora diaria de ejercicios o caminatas ayuda al metabolismo. La actividad física también quema calorías.