‘La bacteria de la meningitis se transmite por vía respiratoria’
Carlos Torres Martínez, infectólogo pediatra colombiano, respondió algunas dudas de nuestros lectores sobre la meningitis.
¿Qué es la meningitis?
La meningitis es la inflamación del tejido que rodea el cerebro. Si es causado por bacterias, aparece con pus, con materia. Es un problema neurológico de una severidad bastante alta. Hay muchos tipos de meningitis, pero las infecciosas, que son la mayoría, son virales o bacterianas. Las virales casi siempre son más fáciles de solucionar, sin antibióticos. Auque el paciente presenta mucho dolor de cabeza y vómito, tiende a mejorarse espontáneamente y lo más probable es que quede sin secuelas. Pero la bacteriana es mucho más grave. Es producida al menos por tres tipos de bacterias en la población pediátrica. Para dos de ellas ya hay vacunas, en el caso de la tercera (el meningococo) las medidas de prevención son recientes, por lo que la sensibilización sobre la necesidad de usarla es baja. Por eso nos interesa tanto hablar del tema.
¿Es más común en los niños?
En los niños, la infección por meningitis es muy común, pero le puede dar meningitis a cualquier persona. Si estamos hablando en el caso particular del meningococo, la enfermedad afecta a todos los grupos de edad. Por supuesto que en nuestro continente, América del Sur, casi el 40% por ciento es menor de los dos años.
¿Cuáles son los grupos que están en mayor riesgo de contraer la bacteria?
Esta bacteria se transmite por vía respiratoria. El 10% de las personas son portadoras de la bacteria, más aún en la época adolescente. Cuando hay situaciones donde los niños y los adultos conviven, por ejemplo, los jardines escolares, universidades públicas o cuando hay escenarios de hacinamiento, las posibilidades que exista meningococo son mayores. También hay condiciones propias de la persona, de su sistema inmunológico, que pueden incidir. Particularmente, quienes no tienen bazo o que no les funciona bien. Pero no hay que equivocarse, sólo el 10 % que contraen la bacteria del meningococo, tienen estas características. El 90% de las personas estaban en la calle y les dio la enfermedad. A pesar de que no es muy frecuente, este padecimiento es de tal impacto que la mortalidad es muy alta.
El meningococo afecta a todos los órganos y, aparte de la meningitis, provoca una enfermedad que se llama meningococcemia, que se da cuando la bacteria llega al torrente sanguíneo. Cuando esto ocurre, hay sangrado dentro de la piel y el tejido de esas áreas puede morir (tornarse necrótico o gangrenoso).
¿Qué secuelas puede dejar una meningitis?
En todas las meningitis, las secuelas pueden ser convulsiones, sorderas, retraso mental y otros daños neurológicos. Pero como esta enfermedad es tan grave y acaba con los vasos sanguíneos es impresionante ver cómo los dedos o las manos de las personas van perdiendo su circulación, se vuelven negras y se caen. Entonces, incluso en los mejores hospitales del mundo, quienes sobreviven pueden tener hasta el 20% de secuelas de amputaciones severas. Se calcula que en el mundo 60.000 personas quedan amputadas por meningococo cada año y mueren 50.000.
¿Es fácil diagnosticar esta enfermedad?
No es nada fácil. Se trata de un diagnóstico clínico hecho por un especialista. Se dice que una persona que tenga fiebre alta, rigidez en el nuca, dolor de cabeza, le moleste la luz y le empiecen a aparecer unos puntitos rojos que progresan y se vuelven manchas negras, lo más probable es que tenga meningococo. El gran problema es que solamente entre el 50 y 60% de las personas hacen esos síntomas y cuando se evidencian, la enfermedad ya tiene entre 24 y 36 horas de evolución y la posibilidad de muerte es alta.
Ante esto, un doctor intenta saber qué germen es, pero necesita hacer un cultivo a partir de una muestra de sangre o de un líquido denominado cefalorraquídeo. Este último se extrae de la parte lumbar, entre las vértebras. Es una técnica que no es complicada y que los médicos la hacemos a diario, el inconveniente es que los resultados se obtienen en tres días y el laboratorio que se emplea debe ser muy bueno.
En conclusión hay muchas limitaciones: de diagnóstico, de cultivo, de laboratorio. Por eso es tan importante la vacuna. Por poner un ejemplo, Londres era el sitio donde más se vía esta enfermedad. Los ingleses vacunan hace 10 años porque saben que si no lo hacen muchos de los pacientes se podrían morir.
¿Cuál es el tratamiento de la meningitis?
Digamos que tenemos la situación ideal, diagnosticamos la enfermedad y tenemos una unidad muy buena de cuidados intensivos. Nos enfrentamos con un problema. El paciente pierde rápido líquidos, su corazón no se puede sobrecargar y, al mismo tiempo que está sangrando por todos lados, se le forman coágulos en los vasos sanguíneos. Frente a esto, sólo se salva el 60% de las personas. El resto a pesar de tenerlo todo, sigue un curso irreversible y se muere. Esta es la enfermedad en la que se han probado toda una serie de inmunoterapias y ninguna ha mejorado la supervivencia en los últimos 10 años.
¿Qué pasa con las vacunas?
En los países donde la meningitis es más frecuente, los afectados son uno por cada 100.000 habitantes. Las cifras en Ecuador son pequeñas, porque los datos registrados son aquellos que llegaron al laboratorio central del país y los cultivaron, no los del paciente que murió en el Oriente en menos de 24 horas. Por eso es importante la vacuna. Lo primero que hay que entender es que las vacunas nuevas han cambiado la historia del meningococo. Las que había antes no funcionaban del todo porque el organismo no las recibía bien y no creaban defensas. La verdadera importancia de las vacunas recientes es que son conjugadas y actúan creando defensas y alargando esta protección. Hasta hace unos dos teníamos vacunas que sólo protegían contra uno de los cinco tipos de meningococos más peligrosos. En la actualidad, son tetravalentes (protegen contra cuatro tipos). Desde hace un año se ponen en niños desde nueve meses de vida hasta adultos de 55 años.
¿Es verdad que los niveles altos de fiebre podrían terminar en meningitis?
La fiebre es una alerta para que se busque la ayuda de un médico, pero no quiere decir que la temperatura alta sea la que cause meningitis. No se quema el cerebro como dicen las abuelitas.