El actor Gary Coleman falleció el 28 de mayo del 2010. Foto: captura.
Este lunes 28 de mayo del 2018 se cumplen ocho años de la muerte de Gary Coleman, el actor norteamericano que saltó a la fama siendo tan solo un niño, en la década del 80, por su actuación en la comedia ‘Diff’rent Strokes’. Falleció a los 42 años en Utah por una hemorragia intercraneal.
Nació con una enfermedad renal crónica y en sus primeros años de vida ya sabía que no superaría los 1,40 metros y que sus problemas de salud empeorarían con el paso de los años.
Se hizo famoso a nivel mundial tan solo a los diez años, cuando llegó a ‘Diff’rent Strokes’., que se estrenó en los Estados Unidos en 1978.
Su personaje, Arnold Jackson, se destacó por sobre todos los demás. Su simpatía y su clásica frase “¿De qué estás hablando Willis?” -que le decía en casi todos los episodios a su hermano en la ficción, acompañada por un divertido gesto-, se ganaron el corazón de todos los seguidores de la serie.
Fueron ocho años los que estuvo al aire ‘Diff’rent Strokes’, en los que los productores sacaron provecho no solo de la popularidad del joven Coleman sino también de las casi nulas alteraciones físicas del actor. Su fama alcanzó niveles inimaginables en el programa más popular del mundo en su momento: se había convertido en una auténtica leyenda en vida.
Durante aquel tiempo, Coleman actuó en varias películas, entre las que se destacan ‘On the Right Track’ y ‘The Kid with the Broken Halo’. Aunque con ciertas dificultades: en 1984 se sometió a un trasplante de riñón y debió realizar muchas sesiones de diálisis.
Después de 189 capítulos, la serie concluyó en 1986. Y con ella, la fama de Coleman: nunca pudo despegarse del personaje de Arnold. Solo tuvo un pequeño papel en ‘Casados con Hijos’, donde interpretó al guardia de un edificio, y algunas participaciones especiales en series. También apareció en un capítulo de ‘Los Simpsons’.
En la década del 90 su nombre empezó a asociarse con el escándalo. Mucha repercusión pública tuvo la demanda que realizó contra sus padres y su mánager, a quienes acusó de malversar los fondos que ganó durante su trabajo en ‘Diff’rent Strokes’. No conseguía empleo y tuvo dos intentos de suicido. Luego trabajó como guardia de seguridad en un parque y en una playa de estacionamiento.
En 2003 se postuló a la gobernación de California, en la que se llevó 14 000 votos: quedó en octavo puesto, entre 135 candidatos.
Volvió a ser noticia en 2009, cuando quedó detenido por una denuncia de violencia de género realizada por su mujer. Protagonizó un verdadero escándalo al enfurecer con una periodista que le preguntó por el hecho del que se lo acusaba.
Poco antes de morir contó: “Mi mayor arrepentimiento siempre será ser actor, aunque amo la profesión. Si tuviera el tamaño y la edad, actuaría en películas de ciencia ficción, pero no doy el ‘physique du rol’. La verdad nunca me interesó ser leyenda ni una celebridad, soy mortal”.