Sartore retrata la fauna en peligro de extinción

Un arlequín palmeado (Atelopus palmatus) fue fotografiado por Sartore en el Centro Jambatu. La especie está en peligro crítico de extinción. Foto: Joel Sartore / National Geographic

Tímidos, sonreídos o mirando fijamente a la cámara, algunos de los últimos ejemplares de especies en peligro de extinción posan ante el lente de Joel Sartore. Más de 9 000 animales han sido retratados por este fotógrafo, en alrededor de 40 países, a través de Photo Ark, una iniciativa que este mes también llegó al Ecuador para recordar a las personas que estos animales podrían desaparecer.
Bajo un fondo negro o blanco, Sartore logra capturar las miradas y expresiones de anfibios, aves, reptiles, peces, invertebrados y mamíferos, con la intención de generar una reacción de quien observa sus fotografías. “Mis imágenes buscan inspirar a las personas para que protejan a estos animales, antes de que sea muy tarde”, dice.
Su interés por la fotografía de naturaleza surgió cuando estaba en la secundaria. A sus 30 años logró obtener su primer trabajo para la revista National Geographic. Desde ese momento, contar historias de animales a través de sus imágenes se convirtió en su principal motivación. Esto se fortaleció hace 24 años con la creación del proyecto Photo Ark, con el que ha recorrido más de 250 zoológicos, acuarios y centros de rescate animal alrededor del mundo.
Por medio de esta iniciativa se documentan especies en peligro para inspirar a las personas a cuidar sus hábitats naturales y revertir la situación. También ha permitido financiar proyectos de conservación y programas de educación.
Sartore cuenta que durante este tiempo ya se han extinguido algunos animales que ha retratado, como la rana arbórea de patas rayadas de Rabb. Esto es un indicio -dice- de que no solo los animales pueden desaparecer, sino también los humanos.
A finales de enero, Sartore se trasladó hasta Quito para documentar alrededor de 100 especies en el zoológico de Guayllabamba, el Centro de Investigación y Conservación de Anfibios Jambatu y la Balsa de los Sapos de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, donde también ofreció una conferencia sobre su trabajo.
“Fue excepcional”, dice Sartore, al recordar su visita al país. Sus actividades empezaron en el Centro Jambatu, donde fotografió a alrededor de 50 especies. Luis Coloma, director de este centro, explica que el fotógrafo estadounidense se vio sorprendido al tener contacto con la colección más importante del mundo de ranas arlequín y marsupial, las cuales se conservan en este lugar. Esta fue una oportunidad también para aprender sobre su trabajo relacionado con la conservación, dice Coloma.
El segundo destino de Sartore fue la Balsa de los Sapos, donde ya había fotografiado a algunos especímenes hace 10 años, cuando vino al país para hacer un reportaje sobre las amenazas del hongo kitrido.
Andrés Merino-Viteri, director de este sitio, explica que en este centro fueron fotografiados 40 animales, a partir de una lista que acordaron previamente. Uno de estos fue la especie de rana Hyloscirtus ptychodactylus (foto) que está en peligro.
En el zoológico de Guayllabamba, Sartore tomó fotografías de 20 especies, sobre todo de mamíferos. El olinguito fue uno de sus elegidos, ya que esta era la primera vez que escuchaba sobre este animal.
El fotógrafo de National Geographic dice que su visita al país le demostró que la biodiversidad de Ecuador es “impresionante”, pero la existencia de estas especies en el país está en riesgo debido a la pérdida de hábitat, la deforestación y las consecuencias del cambio climático. “Mi trabajo con Photo Ark, es poder contar esta realidad al mundo, para que el público se interese y actúe, mientras todavía haya tiempo”, finaliza.