Rucu fue víctima de cacería y vivió un tiempo como mascota. Actualmente es el cóndor en cautiverio más longevo del país. Foto: cortesía Andrés Ortega.
Rucu es el cóndor más longevo bajo cuidado humano que vive actualmente en el país. Hace más de 30 años, esta ave fue extraída de su hábitat. Fue víctima de la cacería y vivió un tiempo como mascota en un hogar. A sus 50 años, ahora permanece en el Centro de Rescate Ilitio, donde recibe fisioterapia para aliviar sus dolores y monitorean su salud.
Este lunes, 23 de febrero de 2021, Rucu se realizó una tomografía y una ecocardiografía. Andrés Ortega, director de la carrera de Medicina Veterinaria de la Universidad UTE, cuenta que, junto con la Fundación Cóndor Andino y con el apoyo de Cardiomedicc y Pet Tomography, se llevó a cabo un estudio completo de este animal.
Rucu recibió anestesia inhalada y con la ayuda de los veterinarios ingresó a este tomógrafo de última generación. Esta es la segunda vez que se realiza un examen de este tipo en el país y la primera de cuerpo completo. También es la primera ocasión que se practica una ecocardiografía a un cóndor. Ortega explica que la intención de hacer este procedimiento era ver el estado de su corazón y de su organismo.
Cuando Rucu fue cazado, hace más de 30 años, varios perdigones ingresaron a su cuerpo. Uno de estos, fracturó una de sus extremidades. Al ser retenido como mascota en el Valle del Chota, sin un tratamiento adecuado, los huesos fracturados se consolidaron incorrectamente.
En un inicio se pensaba que su extremidad estaba afectada porque lo habían tenido amarrado, hasta que en el 2008 fue examinado por los especialistas de la Fundación Zoológica del Ecuador y se descubrió el problema. Ortega dice que esta lesión “ya le empieza a pasar factura” debido a su edad.
Anahí Hidalgo, veterinaria de la Fundación Cóndor Andino y del Centro de Rescate Ilitio, cuenta que, debido a la lesión, Rucu no puede aterrizar con facilidad y esto ha causado que vuele menos. Para disminuir el dolor y tratar la inflamación, este cóndor empezó a recibir fisioterapia. Gracias a este tratamiento, ahora está volando con más frecuencia y cada vez necesita menos ayuda.
Rucu todavía tiene alrededor de 10 perdigones en su organismo. La veterinaria de la Fundación Cóndor Andino explica que su cuerpo los encapsuló y lo mejor es no sacarlos porque se puede causar un mayor daño. Cada año, se revisan los valores de metales pesados en su sangre para asegurarse de que no estén incrementando. Los últimos exámenes también se realizaron para chequear el estado y la ubicación de estos.
A lo largo de su vida, esta ave ha pasado varias pruebas. Rucu fue el primer cóndor del país en usar una prótesis temporal de pico. En el año 2017, los veterinarios Andrés Villagómez y Ortega le fabricaron uno de acrílico, que lo usó hasta que su pico lastimado volvió a crecer. También se intentó que formara una pareja en cautiverio, pero el proceso no fue exitoso.
Tras los últimos exámenes, el cóndor fue llevado al Hospital Planeta y Vida para su recuperación. Después será trasladado nuevamente a su hogar, el Centro de Rescate Ilitio, donde continuará con su fisioterapia y los tratamientos para asegurar que tenga una buena calidad de vida durante sus últimos años.
Para Ortega, las complicaciones que tuvo Rucu son una muestra de los daños que causan la cacería y la tenencia ilegal a los animales silvestres. Debido a sus secuelas, esta ave nunca pudo recuperar su libertad.
Video: YouTube Saga Creativa