El próximo 10 de abril se celebrará el Domingo de Ramos. El Ministerio del Ambiente promueve la campaña Tradición y Conservación van de la mano. El objetivo es evitar la comercialización de la palma de cera durante la celebración católica.
La Cartera de Estado presentó la campaña este 7 de abril del 2022 en el sector de La Floresta, en Quito. Byron Lagla, director de Biodiversidad; Miguel Mayorga, jefe del Departamento de coordinación Operacional de la Unidad de Protección de Medio Ambiente (UPMA), y Ángel Ibarra, sacerdote de la parroquia, explicaron la importancia de preservar la palma de cera.
La palma de cera es una especie de lento crecimiento, requiere más de 80 años para iniciar su ciclo reproductivo y puede superar los 200 años de edad.
Sus frutos son el alimento de tucanes, pavas de monte, loros, entre otras aves, y de mamíferos como armadillos, osos, venados, pecaríes, roedores y primates.
La palma sirve de hogar para algunos animales en peligro de extinción o críticamente amenazadas como el perico cachetidorado, el loro orejiamarillo, posiblemente extinto.
Desde el 2012, Ambiente ha reforestado siete hectáreas de palma de cera en los cantones de Pallatanga y Colta, provincia de Chimborazo.
Cada año alrededor de 2 000 personas entre estudiantes, sociedad civil, inspectores honoríficos y UPMA colaboran con el control de las áreas con palma, durante estas fechas.
Sanción por comercializar
Las autoridades recomiendan utilizar materiales alternativos para la elaboración de los ramos.
Prisión de 1 a 3 años es la pena tipificada en el artículo 247 del Código Orgánico Integral Penal para quien recolecte, extraiga y comercialice la palma de cera.